Tegucigalpa, Honduras
Entre el dolor y las lágrimas sepultaron este domingo a tres hemanas que murieron después de ser a tacadas a balazos en El Hato de Enmedio de Tegucigalpa. El hecho violento ocurrió el jueves pasado.
Dulce María Valladares (13), Ana Valladares (14) y Sara Gisselle López (16) se dedicaban a recoger botellas de plástico en la zona para ganarse el pan de cada día.
Las menores fueron enterradas en el cementerio de El Durazno, en la salida al norte de la capital.
En ese hecho perdieron la vida dos varones conocidos como “Adelito” y Luis Carlos Menocal González (15), quien quedó subido en la paila de un vehículo pick- up, en un intento por salvarle la vida.
Una sexta víctima solo fue identificada como Abraham, y fue trasladado gravemente herido al Hospital Escuela Universitario (HEU) para intentar preservarle la vida.
Entre el dolor y las lágrimas sepultaron este domingo a tres hemanas que murieron después de ser a tacadas a balazos en El Hato de Enmedio de Tegucigalpa. El hecho violento ocurrió el jueves pasado.
Dulce María Valladares (13), Ana Valladares (14) y Sara Gisselle López (16) se dedicaban a recoger botellas de plástico en la zona para ganarse el pan de cada día.
Las menores fueron enterradas en el cementerio de El Durazno, en la salida al norte de la capital.
En ese hecho perdieron la vida dos varones conocidos como “Adelito” y Luis Carlos Menocal González (15), quien quedó subido en la paila de un vehículo pick- up, en un intento por salvarle la vida.
Una sexta víctima solo fue identificada como Abraham, y fue trasladado gravemente herido al Hospital Escuela Universitario (HEU) para intentar preservarle la vida.
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 Los rostros de dolor son evidentes. Tres menores, mujeres, que tenían un futuro por delante en medio de todas las dificultades.
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| Los vecinos del lugar y, por supuesto, la familia estuvieron presentes para dar el último adiós.
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 Niños observan el rostro de una de las menores que murieron abatidas a tiros en Tegucigalpa.
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