La Ceiba, Honduras.
Un bebé de unos nueve meses de edad fue rescatado ayer por agentes policiales, luego que fuera abandonado en la borda del río Cangrejal, debajo del puente Reino de Suecia en esta ciudad.
El pequeño fue dejado sobre el monte, acostado en una colcha, con un biberón y dos calzonetas a su lado.
Ayer, cuando el sol se ocultaba, vecinos encontraron al bebé, debido a que este no paraba de llorar. El llanto los guió hasta el lugar donde se encontraba el niño y de inmediato llamaron a las autoridades policiales, quienes se desplazaron al lugar. Allí lo encontraron vestido con un traje anaranjado con rayas negras y blancas.
Ante el asombro de los vecinos, varios policías preventivos arrullaron en sus brazos al pequeño y lo trasladaron a la Jefatura Departamental de Atlántida, adonde un grupo de mujeres policías se encargaron de él.
“Recibimos una denuncia al 911 que un niño estaba abandonado en la borda del puente del Reino de Suecia, por lo que de inmediato nos trasladamos al lugar, cuando llegamos el bebé estaba llorando sobre una colcha”, relató el policía Wilson Ávila Salgado, quien fue uno de los agentes que llegó a rescatarlo.
“Nos conmovió mucho al encontrarlo en la situación que estaba, es una lástima que existan personas sin conciencia, pero gracias a Dios que lo pudimos rescatar a tiempo y ahora está acá con nosotros”, agregó Ávila Salgado.
El bebé se convirtió en la alegría en la sede policial, donde todos los agentes le brindaban atenciones.
“El niño tiene entre nueve a 10 meses, se sienta solo, es juguetón, está en buenas condiciones, solo que se encuentra un poco agripado, pero lo importante es que lo tenemos aquí y nos está dando alegrías”, expresó Marcela Hernández, la mujer policía que recibió al pequeño.
Todo el personal de turno se unió para comprarle alimentos y otros enseres al pequeño, al tiempo en que las autoridades investigan el paradero de sus progenitores.
Un bebé de unos nueve meses de edad fue rescatado ayer por agentes policiales, luego que fuera abandonado en la borda del río Cangrejal, debajo del puente Reino de Suecia en esta ciudad.
El pequeño fue dejado sobre el monte, acostado en una colcha, con un biberón y dos calzonetas a su lado.
Ayer, cuando el sol se ocultaba, vecinos encontraron al bebé, debido a que este no paraba de llorar. El llanto los guió hasta el lugar donde se encontraba el niño y de inmediato llamaron a las autoridades policiales, quienes se desplazaron al lugar. Allí lo encontraron vestido con un traje anaranjado con rayas negras y blancas.
Ante el asombro de los vecinos, varios policías preventivos arrullaron en sus brazos al pequeño y lo trasladaron a la Jefatura Departamental de Atlántida, adonde un grupo de mujeres policías se encargaron de él.
“Recibimos una denuncia al 911 que un niño estaba abandonado en la borda del puente del Reino de Suecia, por lo que de inmediato nos trasladamos al lugar, cuando llegamos el bebé estaba llorando sobre una colcha”, relató el policía Wilson Ávila Salgado, quien fue uno de los agentes que llegó a rescatarlo.
“Nos conmovió mucho al encontrarlo en la situación que estaba, es una lástima que existan personas sin conciencia, pero gracias a Dios que lo pudimos rescatar a tiempo y ahora está acá con nosotros”, agregó Ávila Salgado.
El bebé se convirtió en la alegría en la sede policial, donde todos los agentes le brindaban atenciones.
“El niño tiene entre nueve a 10 meses, se sienta solo, es juguetón, está en buenas condiciones, solo que se encuentra un poco agripado, pero lo importante es que lo tenemos aquí y nos está dando alegrías”, expresó Marcela Hernández, la mujer policía que recibió al pequeño.
Todo el personal de turno se unió para comprarle alimentos y otros enseres al pequeño, al tiempo en que las autoridades investigan el paradero de sus progenitores.
