25/04/2024
03:50 PM

Hondureño torturaba a su hijastro de tres años solo por llorar

Un jornalero originario de Gracias, Lempira, le ocasionó severas lesiones al hijo de su pareja, a quien castigaba con lazos, cables y a patadas.

San Pedro Sula, Honduras.

Un menor de tres años fue víctima de maltrato por parte de su padrastro, quien al no tolerarle ni siquiera el llanto lo castigaba con lazo y cables de energía eléctrica.

Por unos tres meses, el niño estuvo a merced de la insensibilidad de José Armando Melgar Mejía (23), un agricultor originario de la aldea El Pacayal, en Gracias, Lempira, con quien la madre del pequeño, Guadalupe Hernández Galdámez, decidió convivir.

La madre partió de esta ciudad con su hijo sin imaginar el calvario que viviría el pequeño, quien ahora está hospitalizado en el hospital Mario Catarino Rivas con severas lesiones en su cuerpo y una fractura, producto también de patadas que le daba Melgar. La mujer guardaba silencio ante el abuso verbal y físico de su pareja, del cual también ella era víctima, confirma un fiscal del Ministerio Público (MP).

La madre aduce que aguantaba por la falta de recursos económicos. Fue hasta que el hombre castigó al pequeño con lazos y cables de energía que reaccionó y fue auxiliada por vecinos que ya sospechaban del infierno al que estaba sometido el niño.

Una vecina le dio L500.00 para que pagara su pasaje hasta San Pedro Sula, donde llegó el pasado martes.

La mujer relata que el hombre de quien se enamoró también sometía a otros castigos a su hijo.

“Si el niño en la madrugada lloraba, se enojaba y lo sacaba a la cocina, allí lo dejaba toda la noche. Una vez le dijo que quería orinar y lo obligó a salir a la calle y lo sentó en la tierra, estaba bien caliente porque era el mediodía. Pero no le importó y quemó a mi niño”, relató la mujer.

La familia de la mujer que reside en esta ciudad, al conocer todo lo que había vivido el niño, lo llevó al centro asistencial, donde los médicos indicaron que presenta un cuadro de politraumatismo y tiene quemaduras de primer grado en ambos glúteos .

El infante está en observación y al cuidado de los médicos. Su estado es regular.

Denuncias

Los familiares del pequeño también interpusieron la denuncia en el Ministerio Público (MP), donde se detalla la serie de maltratos al que estaba sometido el menor. “Ahora se hacen los procedimientos para presentar el requerimiento fiscal contra el agresor por el delito de maltrato por transgresión”, dijo uno de los investigadores del MP.

Las denuncias de abuso contra menores de parte de padres o padrastros son constantes. El MP presentó el año pasado unos 60 requerimientos por violencia intrafamiliar, violaciones sexuales, actos de lujuria y maltratos por transgresión, pero hay muchos que quedan en el anonimato por la falta de denuncias.