Tegucigalpa, Honduras.
El sentimiento de tristeza lo acompañará por el resto de su vida, al igual que el agradecimiento a su amigo que ofrendó su vida por él.
Eduardo Flores es el taxista que fue agredido por los diputados Edgardo Castro y José Luis Galdámez. Con voz temerosa y pidiendo que por favor no se le tomaran fotografías, ya que teme por su vida, Eduardo contó lo sucedido el pasado miércoles, cuando su compañero Marvin Alexander Sánchez García (35) murió de un disparo que le propinó Luis Galdámez.
Recordó que su compañero iba en contravía cuando una patrulla motorizada lo detuvo para aplicarle una esquela.
“Él (Galdámez) cuando ve la motorizada da la vuelta en el parqueo y dice que él viene saliendo cuando no era verdad”, comentó.
“Yo estaba en la esquina y les dije a los policías que si le van a hacer una falta (esquela) al motorista de taxi, que sean justos y se la hagan a él (al diputado). En eso viene el señor Castro, el “Chele”, y me empieza a gritar, que cuál era mi loquera, que ellos eran diputados y que no les iban a hacer nada, entonces, yo le dije a los policías que tenía que ser justo, que todos somos un pueblo, que le hiciera la esquela también”, puntualizó.
El sentimiento de tristeza lo acompañará por el resto de su vida, al igual que el agradecimiento a su amigo que ofrendó su vida por él.
Eduardo Flores es el taxista que fue agredido por los diputados Edgardo Castro y José Luis Galdámez. Con voz temerosa y pidiendo que por favor no se le tomaran fotografías, ya que teme por su vida, Eduardo contó lo sucedido el pasado miércoles, cuando su compañero Marvin Alexander Sánchez García (35) murió de un disparo que le propinó Luis Galdámez.
Recordó que su compañero iba en contravía cuando una patrulla motorizada lo detuvo para aplicarle una esquela.
“Él (Galdámez) cuando ve la motorizada da la vuelta en el parqueo y dice que él viene saliendo cuando no era verdad”, comentó.
“Yo estaba en la esquina y les dije a los policías que si le van a hacer una falta (esquela) al motorista de taxi, que sean justos y se la hagan a él (al diputado). En eso viene el señor Castro, el “Chele”, y me empieza a gritar, que cuál era mi loquera, que ellos eran diputados y que no les iban a hacer nada, entonces, yo le dije a los policías que tenía que ser justo, que todos somos un pueblo, que le hiciera la esquela también”, puntualizó.
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Sostuvo que ante su reclamo, el diputado Castro le dijo “Y cuál es tu mier..., semejante hijo de la gran pu..., querés que te agarre a pij... Con esas palabras así. Yo le dije mirá, yo no te estoy haciendo nada, y levanté las manos”.
Recordó que en ese momento Marvin estaba dentro de su taxi revisando el teléfono celular; él pasaba metido en las redes sociales, era bien activo en eso.
“En eso, él (Edgardo “Chele” Castro) se baja y me agrede. Entonces, cuando los compañeros miran la acción, lógico, soy compañero, tengo más de ocho años de estar conviviendo con ellos”, expresó.
“Al ver el altercado, Marvin llega a separarme y cuando Galdámez ve que el grupo va a separarme, viene él y saca el arma, yo quedé en shock, yo solo miro que él (Marvin) me empuja y pasa el disparo, no lo hace al aire, lo hace hacia la humanidad. Yo solo siento que él (el “Chele” Castro) me pone la mano en el pecho y Marvin me empuja, solo estamos los tres y él (Galdámez) le pegó el tiro, no es como él dice, que lo hizo al aire, iba para la humanidad de quien agarrara”, expresó.
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“Cuando yo miro a Marvin que cae al suelo, quedé en shock, porque pienso que son los policías que están disparando al aire y miro a Marvin tirado y le miro el arma a Galdámez”.
El taxista aseguró que después de cometer el hecho, los diputados pretendieron darse a la fuga, pero uno de los compañeros les dijo que les pusieran taxis para que no movieran el vehículo en que se conducían.
Recuerdan que ya herido en el suelo, Marvin le dijo a Galdámez “pucha, hermano, voté por vos y me heriste”, después les dijo a sus compañeros “me ahogo, me ahogo”, y fue cuando reaccionamos y lo llevaron al Hospital Escuela, en donde falleció mientras era atendido.
“Nosotros en ningún momento lo agredimos físicamente a él (Galdámez), en ningún momento lo tocamos como él dice, si él dice que íbamos con palos y machetes que enseñe los palazos y machetazos, dizque lo golpeamos en la cabeza, que enseñe dónde están los golpes, mientras que él sí disparó a matar y disparó a matar a mi persona y mala fortuna que pegó en Marvin el disparo”, relató.
Él (Galdámez) lo hizo (el disparo) a quien agarrara y cuando miró que Marvin me separó y fue cuando disparó contra su humanidad, agregó.
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Aseguró que después de herir de gravedad al taxista, “Galdámez no hallaba qué hacer con el arma... no hallaba qué hacer”.
Eduardo describió la muerte de su compañero como “algo triste y lo único que pedimos es justicia y que nos den protección”. Aseguró que después del crimen llegó “el hijo de él (Galdámez) a querernos amenazar, dijo que uno por uno iba a pagar lo que estábamos haciendo”.
Agradecimiento
Eduardo dijo que la demostración de amistad de Marvin al arriesgar su vida por él le ha creado un compromiso con sus hijos. “Éramos como hermanos, es triste, en lo que podamos vamos a estar presentes para apoyarlos en lo que sea necesario”. “Es doloroso... no tengo palabras para explicar lo que yo siento ahorita”, comentó.
“Imagínese lo que dijo él (Galdámez) cuando disparó, que él en dos horas podía estar libre, que él tenía poder, entonces cómo no voy a tener temor si él dice eso, tememos por la vida de nosotros”, aseveró.
En honor a su amigo, Eduardo dijo que “yo esto lo voy a llevar hasta el final, hasta que él esté en la cárcel pagando una condena que debe porque tiene que pagar”. “Tengo miedo por mi familia, no sé qué hacer, no estoy trabajando ahorita por el mismo temor que tengo”.
Quién era el taxista
Convertirse en un reconocido artista era uno de los muchos sueños que tenía Marvin Alexander Sánchez García.
Entre sus actividades como taxista, padre, esposo y miembro de una iglesia evangélica, Marvin también era cantante de reguetón romántico y cristiano. Una de las últimas creaciones del artista nacional fue el sencillo Te confieso, el cual canta a dúo, integrando así Los Afortuna2.
En un acto de solidaridad en su honor, los taxistas del punto Villa Olímpica-Centro lo han programado como timbre en su teléfono celular. “Él buscó apoyo en varios medios de comunicación, pero nunca lo recibió como se debía, cantaba y escribía las canciones, tenía mucho talento”, comentó uno de sus compañeros.
Seguridad
Ramón Sabillón, director general de la Policía Nacional, se presentó al punto de taxis en donde dialogó con los ruleteros, quienes le relataron los hechos y pidieron seguridad.
Los taxistas presentaron la denuncia de la supuesta amenaza hecha por el hijo de Galdámez y de la presencia de sospechosos merodeando el punto.
El comisionado les prometió que se investigarán las amenazas hechas contra ellos y como una medida preventiva se asignó un grupo de agentes que permanecerán de forma permanente en el punto de taxis para velar que nada malo suceda.
El jefe policial confirmó que los taxistas denunciaron haber sido amenazados por “un hijo del señor Galdámez y llamamos a la cordura, que ya no sigan abriendo esa brecha, que esa sangre que ya corrió que no vaya a seguir, entonces llamamos a la paz y la prudencia”.
