San Pedro Sula, Honduras.
Vestidos con indumentaria militar y en dos camionetas de lujo andaban los individuos que mataron en la colonia Lomas de Pepe Lobo del sector El Carmen al dirigente comunal Carlos Alberto Carrasco (56) y sus dos guardaespaldas.
En el hecho ocurrido a las 9:00 pm del lunes también murió Ronald Ernesto Cárcamo Ramos (22), quien, según sus parientes, residía en esa colonia y trabajaba vendiendo queso en el mercado, y no como guardaespaldas del líder comunal.
Las otras dos víctimas son Juan Ramón Pacheco García (21) y José German Orellana Alvarado (19), los que eran parte de la escolta de Carrasco.
El vocero de la Policía Nacional, César Augusto Jhonson, manifestó que según las averiguaciones preliminares, la hipótesis más fuerte que manejan en cuanto al móvil del cuádruple crimen es que fue originado por pleitos de tierras, ya que Carrasco se dedicaba a la invasión de predios.
Jhonson informó que los autores del asesinato se transportaban en dos camionetas de lujo marca Toyota Prado, una gris y otra negra.
El oficial detalló que Carrasco fue sacado de su vivienda, al igual que sus guardaespaldas, y cuando ya tenían a los cuatro hombres en la calle principal los mataron.
“Eso nos preocupa en gran manera porque los últimos días habían estado tranquilos en cuanto a hechos sangrientos en San Pedro Sula. Lastimosamente se dio este evento y ya estamos investigando sobre quiénes fueron los que cometieron el mismo para capturarlos”, dijo Jhonson
El vocero policial manifestó que la información que les dieron testigos presenciales del hecho indica que los homicidas andaban con indumentaria militar y con pasamontañas. Según lo declarado por los testigos, los tipos se bajaron de las camionetas y llegaron a las viviendas adonde sacaron a los hombres para mataron.
Pidió auxilio
Jhonson dijo que Carrasco gritó pidiéndoles auxilio a los vecinos, pero “lastimosamente se están viviendo momentos difíciles y nadie quiere ayudar a nadie cuando se da este tipo de situaciones porque tampoco sabemos en qué camina cada ciudadano, en qué situaciones se mete o en qué problemas anda”.
Francis García, madre de Juan Ramón Pacheco García, al tiempo que irrumpió en llanto, dijo que pide al Gobierno que no quede impune el crimen de su hijo y el de sus compañeros.
“Que se haga justicia porque es injusto lo que hicieron porque ellos estaban haciendo su trabajo, mi hijo de sus labores se iba para su casa”, dijo.
Indicó que su vástago laboraba con Carlos Carrasco como guardaespaldas. “Yo pido que cuando encuentren a los culpables les den como castigo la pena de muerte”, expresó la acongojada madre.
Los parientes de Ronald Ernesto Cárcamo manifestaron que él iba pasando por el lugar cuando se dio el hecho. Explicaron que el joven no era guardaespaldas de Carrasco, sino que vendía queso en el mercado.
Llamado al Presidente
Claudia Pineda, presidenta del Sindicato Nacional del Comercio del Sector Informal de Honduras (Sincosih), manifestó que las luchas que tuvo Carlos Carrasco en las calles fue pedir justicia y que se respetaran los derechos de sus compañeros.
“Pedimos al presidente de la República que no puede quedar en la impunidad el crimen del compañero Carlos Carrasco porque ya no aguantamos la inseguridad en el país”, dijo Pineda.
Recordó que Carrasco fue un miembro activo del Partido Nacional e incluso estuvo aspirando a una diputación por ese instituto político en las elecciones pasadas.
Carrasco era el presidente del Sindicato de los Patronatos de los Bordos y Similares de San Pedro Sula y en el Sincosih fungía como secretario de propaganda y prensa.
José Morales, fiscal del Sincosih, dijo que Carrasco era un hombre que defendía a los pobladores de los bordos y a los vendedores ambulantes.
