Una lesión muscular impidió a Cistiano Ronaldo no jugar la final de la Copa del Rey en el estadio Mestalla, pero eso no lo privó de disfrutar y celebrar los goles con los que el Real Madrid le ganó el título al Barcelona.
El crack portugués estuvo en la grada apoyando a sus compañeros y festejó como un aficionado las anotaciones del argentino Ángel Di María y del galés Gareth Bale para la victoria merengue.
Muy emocionado y eufórico se mostró el luso. A cinco minutos del final llegó al tanto de Bale y de una manera muy efusiva celebró Cristiano con sus compañeros.
Al final, Ronaldo salto al campo de Mestalla para aplaudir y felicitar a los suyos. También dejó una imagen histórica al tomarse el tiempo de saludar y consolar a Lionel Messi.