Danlí, Honduras
Con consternación y repudio, familares y amigos dieron el último adiós a la doctora Silvia Vanesa Izaguirre Antúnez, asesinada en un asalto a bus en el municipio de Trujillo, Colón.
Vestida de blanco y rodeada en su féretro de imágenes de sus animes favoritos, así fue despedida la joven estudiante de medicina.
Cargada por sus más allegados, la doctora en servicio social fue llevada al cementerio general de Danlí, lugar donde le dieron cristiana sepultura.
Al lugar asistieron sus familiares, compañeros de la Facultad de Medicina, amigos y población danlidense le dieron el último adiós a la joven promesa de la patria.
Antes del entierro se ofició una misa de cuerpo presente en la catedral Inmaculada concepción, celebrada por monseñor José Antonio Canales, obispo de la diócesis de esa ciudad.
El cortejo fúnebre salió de la catedral hasta llegar al cementerio, donde los presentes pidieron justicia por la muerte violenta de Silvia Vanessa cuando retornaba de sus vacaciones.
La sociedad danlidense se encuentra consternada por lo sucedido a la joven promesa de la medicina quien laboraba en el hospital Gabriela Alvarado. Hasta el momento tres personas han sido detenidas para investigación del caso.
Piden justicia
Rigoberto Izaguirre, padre de Silvia, pidió a las autoridades sobre los caputarados por este crimen que 'no los dejen sueltos, para que no sigan haciendo daño a promesas, a futuros profesionales con éxito', manifestó.
'Es una estrella que regó, pero mucha luz, dando mucho amor como profesional como hija, compañera, amiga y muestra de ello es lo que se está viviendo', expresó.
Ante lo sucedido, la familia de la doctora promete iniciar una campaña contra la violencia, 'ya que mi hija sea la punta de lanza sobre este lastimoso y doloroso momento como familia', dijo Izaguirre.
'Ella tenía muchos sueños'
La joven promesa, como la llamó su padre, estaba en su servicio social en el municipio de Danlí; Luego tenía planeado viajar fuera del país para estudiar al menos dos especialidades.
