Óscar Kilgore, exalcalde sampedrano, fue absuelto este lunes 19 de marzo del delito de enriquecimiento ilícito durante su gestión al frente de la alcaldía de San Pedro Sula (2002-2006).
La absolución dictada por el Tribunal de Sentencia significa que Kilgore saldrá de la cárcel ya que actualmente sólo cuenta con medidas sustitutivas por un caso anterior.
La Fiscalía de Transparencia y Combate a la Corrupción Pública acusó al exedil de enriquecerse con más de cinco millones de lempiras. Una de las pruebas presentadas por la fiscalía fue un informe del Tribunal Superior de Cuentas (TSC) en el que aparecen viajes, pagos de tarjetas, la adquisición de un vehículo y otros gastos que no están justificados.
El Tribunal de Sentencia dictó el fallo luego de declarar nulo este informe del TSC ya que la fiscalía utilizó una auditoria realizada fuera del tiempo permitido según la ley de esa institución del Estado.
El informe del TSC se realizó después de los cinco años que señala la ley para investigar un funcionario luego de haber cesado en sus funciones. Al declarar la nulidad total del informe, el cual era la prueba fuerte de la fiscalía, los jueces no analizaron los demás documentos presentados en juicio pues tampoco tendrían valor
La defensa de Kilgore presentó también documentos, recibos y constancias que supuestamente probaban que ese dinero corresponde a los salarios que recibió como presentador de noticias en un canal de televisión así como los comprobantes de viáticos que percibió cuando realizó viajes oficiales en varias ocasiones.
'Estoy muy feliz, estamos todos alegres, sí se hace justicia, esto nos honra y queda claro que nunca nos quedamos con dinero del pueblo; han hecho de mi una fiesta durante once años pero yo siempre tuve fe en el Señor de que llegaría la justicia', dijo Óscar Kilgore visiblemente emocionado.
El exalcalde saldrá hoy de la prisión de El Progreso ya que el fallo es de aplicación inmediata. 'Hay tantas cosas buenas que uno no valora pero que recapacitamos en la cárcel, es una enseñanza dura', concluyó Kilgore.
