San Pedro Sula, Honduras.
La presencia en línea es fundamental, considerando que la mayor parte de las búsquedas profesionales son por internet.
Con la expansión de la era digital, las empresas están convencidas de que una página web les da credibilidad, a la vez que les permite conseguir nuevos clientes y “fidelizar” a los que ya tienen.
Estar en la web no solo es para las grandes, puesto que ahora pequeñas y medianas empresas pueden tener su propia tienda en línea por la módica cantidad de 1,800 lempiras al año gracias a una herramienta de comercio electrónico desarrollada por hondureños.
Los emprendedores detrás del proyecto cuentan que la idea surgió para acabar con dos barreras: precios elevados y dificultad técnica.
La premisa de Sube.la es dotar a los usuarios de un dominio de internet, hosting (alojamiento web) y licencia por un año, al tiempo de impartirles talleres y asesorías de forma constante.
Con la herramienta esperan apoyar a emprendedores, profesionales y dueños de pymes a crecer utilizando el internet para vender.
Ricardo Irías, cofundador de Sube.la, cuenta que hace dos meses conoció a una periodista argentina que trabaja en un canal alemán y que estaba interesada en conocer historias de emprendedores hondureños como parte de un segmento de su canal llamado Economía creativa.
“Le presenté a algunos emprendedores y ella hizo su propia investigación. Luego, en una llamada por teléfono me dijo que descartó a varios porque solo estaban en Facebook”, cuenta Irías.
A su criterio, solo vender por redes sociales es limitarse a la economía de subsistencia, y tener una página web es como un kiosko que puede ser tienda con varias sucursales.
“Las redes sociales son importantes, pero tienen un techo limitado. En cambio, las personas confían más al ver una página web, puesto que es más formal”, agrega.
La reacción de la periodista alemana sobre las pymes sin página web dio a entender al equipo de Sube.la que están en la dirección correcta.
La plataforma es funcional para pymes de diferentes sectores y actividades;
por ejemplo, los exportadores al tener su propia página web dan validez y credibilidad a la empresa frente a clientes internacionales.
Los importadores que compran productos para vender pueden construir un catálogo de productos para que los clientes puedan visitarlo.
También aplica a las startups, que validan su idea de negocios apoyándose con un landing page (una página de destino) que describa lo que hace el emprendimiento.
“Hay bastantes comercios que buscan despegar y encontrar la manera de multiplicar sus ventas. Esta es una buena oportunidad para ellos”, asegura Víctor Aguirre, cofundador de Sube.la.
Asequible
Los usuarios pueden abrir una cuenta gratis y probar todas las funcionalidades de la plataforma.
Por el plan de 75 dólares al año (cerca de 1,800 lempiras) reciben el dominio (por ejemplo http://tuempresa.com), hosting y espacio para 500 productos. Por 90 dólares (un poco más de 2,100 lempiras) reciben todos estos servicios y también cinco correos corporativos.
En la actualidad, los desarrolladores de esta plataforma han hecho alianzas estratégicas con organizaciones que apoyan a mipymes y los emprendedores a ingresar al mundo digital.
Por ahora tienen clientes en Choluteca, Danlí, Roatán, San Pedro Sula y Tegucigalpa dedicados a floristerías, servicios legales, bisuterías, artesanos, consultores independientes y muchos más.
Los emprendedores digitales coinciden en que Centroamérica tiene los elementos necesarios para vender y comprar en línea de forma segura y sin complicaciones.
Una publicación de la revista Business Insider destacó que Latinoamérica es una de las regiones de mayor crecimiento del e-commerce en el mundo, solamente detrás de Asia-Pacífico. Para 2019, el comercio electrónico en América Latina generará ventas de alrededor de $85,000 millones.
Además, el e-commerce a nivel de la región latinoamericana ha experimentado un crecimiento exponencial durante los últimos cinco años, en los que se ha cuadruplicado el volumen de ventas a través de este canal.
La presencia en línea es fundamental, considerando que la mayor parte de las búsquedas profesionales son por internet.
Con la expansión de la era digital, las empresas están convencidas de que una página web les da credibilidad, a la vez que les permite conseguir nuevos clientes y “fidelizar” a los que ya tienen.
Estar en la web no solo es para las grandes, puesto que ahora pequeñas y medianas empresas pueden tener su propia tienda en línea por la módica cantidad de 1,800 lempiras al año gracias a una herramienta de comercio electrónico desarrollada por hondureños.
Los emprendedores detrás del proyecto cuentan que la idea surgió para acabar con dos barreras: precios elevados y dificultad técnica.
La premisa de Sube.la es dotar a los usuarios de un dominio de internet, hosting (alojamiento web) y licencia por un año, al tiempo de impartirles talleres y asesorías de forma constante.
Con la herramienta esperan apoyar a emprendedores, profesionales y dueños de pymes a crecer utilizando el internet para vender.
Ricardo Irías, cofundador de Sube.la, cuenta que hace dos meses conoció a una periodista argentina que trabaja en un canal alemán y que estaba interesada en conocer historias de emprendedores hondureños como parte de un segmento de su canal llamado Economía creativa.
| Una usuaria navega por una página de intenet hecha por medio de la plataforma Sube.la, que busca incentivar el comercio electrónico.
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A su criterio, solo vender por redes sociales es limitarse a la economía de subsistencia, y tener una página web es como un kiosko que puede ser tienda con varias sucursales.
“Las redes sociales son importantes, pero tienen un techo limitado. En cambio, las personas confían más al ver una página web, puesto que es más formal”, agrega.
La reacción de la periodista alemana sobre las pymes sin página web dio a entender al equipo de Sube.la que están en la dirección correcta.
La plataforma es funcional para pymes de diferentes sectores y actividades;
por ejemplo, los exportadores al tener su propia página web dan validez y credibilidad a la empresa frente a clientes internacionales.
Los importadores que compran productos para vender pueden construir un catálogo de productos para que los clientes puedan visitarlo.
También aplica a las startups, que validan su idea de negocios apoyándose con un landing page (una página de destino) que describa lo que hace el emprendimiento.
“Hay bastantes comercios que buscan despegar y encontrar la manera de multiplicar sus ventas. Esta es una buena oportunidad para ellos”, asegura Víctor Aguirre, cofundador de Sube.la.
Asequible
Los usuarios pueden abrir una cuenta gratis y probar todas las funcionalidades de la plataforma.
Por el plan de 75 dólares al año (cerca de 1,800 lempiras) reciben el dominio (por ejemplo http://tuempresa.com), hosting y espacio para 500 productos. Por 90 dólares (un poco más de 2,100 lempiras) reciben todos estos servicios y también cinco correos corporativos.
En la actualidad, los desarrolladores de esta plataforma han hecho alianzas estratégicas con organizaciones que apoyan a mipymes y los emprendedores a ingresar al mundo digital.
Por ahora tienen clientes en Choluteca, Danlí, Roatán, San Pedro Sula y Tegucigalpa dedicados a floristerías, servicios legales, bisuterías, artesanos, consultores independientes y muchos más.
Los emprendedores digitales coinciden en que Centroamérica tiene los elementos necesarios para vender y comprar en línea de forma segura y sin complicaciones.
Una publicación de la revista Business Insider destacó que Latinoamérica es una de las regiones de mayor crecimiento del e-commerce en el mundo, solamente detrás de Asia-Pacífico. Para 2019, el comercio electrónico en América Latina generará ventas de alrededor de $85,000 millones.
Además, el e-commerce a nivel de la región latinoamericana ha experimentado un crecimiento exponencial durante los últimos cinco años, en los que se ha cuadruplicado el volumen de ventas a través de este canal.
