San Pedro Sula, Honduras.
Entradas y salidas de San Pedro Sula están siendo objetivo frecuente de grupos de manifestantes que además de apostarse para impedir el paso de miles de personas y vehículos, colocan obstáculos y queman camiones y buses.
El mismo problema sufren los habitantes de El Progreso, La Lima, Villanueva, Pimienta, Potrerillos, así como Choloma.
En San Pedro Sula la gran cantidad de vías cerradas ha dejado a los residentes de varias colonias encerrados.
Una de las zonas afectadas es la colonia Fesitranh, de donde hasta ayer lograron salir los moradores, pues la zona fue desalojada de los protestantes y rastras con las que bloquearon el paso.
Según las autoridades, el cierre del bulevar del norte se produjo por personas que viven en la colonia Juan Ramón Molina, en la zona de Río Blanco y de los bordos, de los cuales muchos pertenecen a estructuras criminales de pandillas, tal como lo informó ayer la Secretaría de Seguridad.
Otra de las áreas afectadas con los bloqueos de las vías es la carretera que conduce a la aldea El Carmen, donde se ubican residenciales como Villas Paraíso, Salamanca, Mayorca, Las Fuentes, donde sus habitantes quedan sin salir al segundo anillo ni por Ocotillo.
Este paso es bloqueado por algunas personas que habitan en el bordo de Los Naranjos y de la aldea El Carmen. La 27 calle, 33 calle y así como en la Villeda Morales son otras de las áreas donde los manifestantes se han apostado obstruyendo la pasada con bloques y troncos de árboles.
En Cofradía el problema es peor, pues está sin acceso desde hace cinco días y algunos de los pobladores solo logran llegar a sus trabajos a pie.
Varias zonas de Villanueva como El Calán, Kilómetro 71, Dos Caminos son de peligro, pues grupos armados se han apoderado supuestamente para hacer sus protestas.
Pese a los desalojos que ha hecho la Policía Nacional y militares, los protestantes vuelven horas después a obstaculizar el paso de los carros y las personas.
Ayer el paso estuvo despejado por lo que cientos de personas lograron llegar a sus hogares.
Mientras el problema cada día es más grave en La Lima, pues el bulevar está tomado y a algunos conductores los dejan pasar exigiéndoles un pago de dinero.
Los progreseños tampoco pueden salir de su ciudad porque las salidas están obstaculizadas desde la noche del domingo 17 de diciembre.
Entradas y salidas de San Pedro Sula están siendo objetivo frecuente de grupos de manifestantes que además de apostarse para impedir el paso de miles de personas y vehículos, colocan obstáculos y queman camiones y buses.
El mismo problema sufren los habitantes de El Progreso, La Lima, Villanueva, Pimienta, Potrerillos, así como Choloma.
En San Pedro Sula la gran cantidad de vías cerradas ha dejado a los residentes de varias colonias encerrados.
Una de las zonas afectadas es la colonia Fesitranh, de donde hasta ayer lograron salir los moradores, pues la zona fue desalojada de los protestantes y rastras con las que bloquearon el paso.
Según las autoridades, el cierre del bulevar del norte se produjo por personas que viven en la colonia Juan Ramón Molina, en la zona de Río Blanco y de los bordos, de los cuales muchos pertenecen a estructuras criminales de pandillas, tal como lo informó ayer la Secretaría de Seguridad.
Otra de las áreas afectadas con los bloqueos de las vías es la carretera que conduce a la aldea El Carmen, donde se ubican residenciales como Villas Paraíso, Salamanca, Mayorca, Las Fuentes, donde sus habitantes quedan sin salir al segundo anillo ni por Ocotillo.
Este paso es bloqueado por algunas personas que habitan en el bordo de Los Naranjos y de la aldea El Carmen. La 27 calle, 33 calle y así como en la Villeda Morales son otras de las áreas donde los manifestantes se han apostado obstruyendo la pasada con bloques y troncos de árboles.
En Cofradía el problema es peor, pues está sin acceso desde hace cinco días y algunos de los pobladores solo logran llegar a sus trabajos a pie.
Varias zonas de Villanueva como El Calán, Kilómetro 71, Dos Caminos son de peligro, pues grupos armados se han apoderado supuestamente para hacer sus protestas.
Pese a los desalojos que ha hecho la Policía Nacional y militares, los protestantes vuelven horas después a obstaculizar el paso de los carros y las personas.
Ayer el paso estuvo despejado por lo que cientos de personas lograron llegar a sus hogares.
Mientras el problema cada día es más grave en La Lima, pues el bulevar está tomado y a algunos conductores los dejan pasar exigiéndoles un pago de dinero.
Los progreseños tampoco pueden salir de su ciudad porque las salidas están obstaculizadas desde la noche del domingo 17 de diciembre.