San Pedro Sula, Honduras.
Los taxis colectivos Oro Verde, que cubrían la ruta a la ciudad de La Lima, dejaron de circular porque no tenían la capacidad de pagar 50,000 lempiras que les cobraban de extorsión cada mes cinco organizaciones criminales.
Taxistas que laboraban en esa empresa manifestaron que dejaron de operar hace dos semanas porque los ingresos que obtenían los socios no les alcanzaban para pagar la extorsión ni los gastos de operación.
Manifestaron que la situación se agravó porque había 25 vehículos trabajando en la ruta y hace dos semanas la mitad de los taxis dejó de circular, ya que no podían seguir pagando el “impuesto de guerra”.
Explicaron que cada unidad pagaba un promedio de 500 lempiras a la semana, lo que hacía un total de 12,500 lempiras semanales y que mes sumaba 50,000 lempiras.
Al retirarse la mitad de los taxis las unidades que quedaron trabajando tenían que sufragar la cuota de los que salieron de circulación, esto duplicó la cantidad que debían pagarle a los extorsionadores y eso los obligó a cerrar operaciones.
En esas condiciones cada taxi de los que estaba trabajando tenía que pagar un promedio de mil lempiras a la semana y los socios 8,000 lempiras mensuales por cada uno de los predios que alquilaban en San Pedro Sula y La Lima para el estacionamiento de los taxis.
Los taxistas y los socios de la empresa que hablaron y que pidieron el anonimato por seguridad manifestaron que están negociando porque quieren volver a operar para beneficio de los ciudadanos.
Según lo informado, los socios de la empresa Oro Verde primero le pagaban impuesto de guerra a cuatro organizaciones delictivas, pero después llegaron los integrantes de una quinta estructura criminal que también les empezaron a cobrar extorsión.
Eso se dio pocos días después de que uno de los conductores de los taxis Oro Verde sufriera un atentado en la colonia Los Pinos. El conductor sobrevivió.
Investigarán
Las autoridades de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) aseguran que no han recibido ninguna denuncia de los taxis Oro Verde sobre el cobro de “impuesto de guerra”.
Manifestaron que como entidad policial investigarán el caso. Las estadísticas de la FNA indican que el sector del transporte es uno de los más afectados por el delito de extorsión en el país.
Los taxis colectivos Oro Verde, que cubrían la ruta a la ciudad de La Lima, dejaron de circular porque no tenían la capacidad de pagar 50,000 lempiras que les cobraban de extorsión cada mes cinco organizaciones criminales.
Taxistas que laboraban en esa empresa manifestaron que dejaron de operar hace dos semanas porque los ingresos que obtenían los socios no les alcanzaban para pagar la extorsión ni los gastos de operación.
Manifestaron que la situación se agravó porque había 25 vehículos trabajando en la ruta y hace dos semanas la mitad de los taxis dejó de circular, ya que no podían seguir pagando el “impuesto de guerra”.
Explicaron que cada unidad pagaba un promedio de 500 lempiras a la semana, lo que hacía un total de 12,500 lempiras semanales y que mes sumaba 50,000 lempiras.
Al retirarse la mitad de los taxis las unidades que quedaron trabajando tenían que sufragar la cuota de los que salieron de circulación, esto duplicó la cantidad que debían pagarle a los extorsionadores y eso los obligó a cerrar operaciones.
En esas condiciones cada taxi de los que estaba trabajando tenía que pagar un promedio de mil lempiras a la semana y los socios 8,000 lempiras mensuales por cada uno de los predios que alquilaban en San Pedro Sula y La Lima para el estacionamiento de los taxis.
Los taxistas y los socios de la empresa que hablaron y que pidieron el anonimato por seguridad manifestaron que están negociando porque quieren volver a operar para beneficio de los ciudadanos.
Según lo informado, los socios de la empresa Oro Verde primero le pagaban impuesto de guerra a cuatro organizaciones delictivas, pero después llegaron los integrantes de una quinta estructura criminal que también les empezaron a cobrar extorsión.
Eso se dio pocos días después de que uno de los conductores de los taxis Oro Verde sufriera un atentado en la colonia Los Pinos. El conductor sobrevivió.
Investigarán
Las autoridades de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) aseguran que no han recibido ninguna denuncia de los taxis Oro Verde sobre el cobro de “impuesto de guerra”.
Manifestaron que como entidad policial investigarán el caso. Las estadísticas de la FNA indican que el sector del transporte es uno de los más afectados por el delito de extorsión en el país.
