23/04/2024
12:01 AM

Un muerto y una turista canadiense desaparecida deja primer frente frío

Un pescador perdió la vida al zozobrar la embarcación en Omoa, Cortés. El paso entre Sonaguera y Sabá quedó interrumpido debido al daño en uno de los cabezales.

    La Ceiba, Honduras.

    Árboles caídos, pasos interrumpidos, una persona muerta, una turista canadiense desaparecida y cuatro miembros de una familia a punto de morir ahogados arrastrados por un río con todo y vehículo es el resultado que dejó hasta ayer el primer frente frío del año en la zona norte del país.

    En Roatán, Maurene Patricia Lalonde (de 73 años) desapareció la mañana de ayer luego que junto a otras personas saliera a bucear al mar Caribe y fuera sorprendida por el fuerte temporal. A las 10:00 am, personal de socorro salió a buscarla a bordo de unas ocho embarcaciones del hotel Anthony’s Key Resort, adonde se hospedaba la norteamericana, con apoyo de dos botes de Barefoot, sin lograr encontrarla.

    La búsqueda fue suspendida a las 5:00 pm y se reanudará este día desde horas muy tempranas de la mañana.

    El oleaje en Guanaja fue fuerte. También el río Uchuapa provocó daños en Arenales y Jocón, en el departamento de Yoro.
    Según nos informan los compañeros de Roatán ella estaba hospedada y decidieron ir a bucear. Lamentablemente con el mal tiempo y con el oleaje bastante elevado que hay se produjo este incidente”, manifestó Abraham Mejía, subcomisionado de la Comisión Permanente de Contingencias, (Copeco). Mientras en Omoa, Cortés, miembros del Cuerpo de Bomberos encontraron ahogado a un pescador identificado como Edy Appenzeller (de 49), quien había desaparecido en alta mar luego que su pequeña embarcación sucumbiera ante el fuerte oleaje del mar.

    Litoral

    Las lluvias también dejaron sus efectos en Colón, uno de los más afectados. Las autoridades de la Copeco informaron que cuatro miembros de una familia estuvieron a punto de ahogarse al tratar de cruzar en su vehículo de paila el afluente que conduce a la comunidad de Río Arriba en el municipio de Trujillo. El automotor fue arrastrado por las embravecidas aguas, aunque lograron salir nadando hasta pegar a tierra firme unos metros abajo. Esto sucedió ante el asombro de curiosos que se encontraban a la orilla sin poder ayudarlos.

    En algunas aldeas de Sonaguera, en Colón, varias personas fueron evacuadas por personal del Cuerpo de Bomberos.
    Además, habitantes de la comunidad de Santa Fe manifestaron estar incomunicados tras la crecida de una quebrada. Mientras que el puente Pires, cerca de Planes, siempre en Colón, estuvo en permanente vigilancia por los organismos de socorro ya que una de sus bases amenazaba con colapsar por la fuerte corriente. Sin embargo, el paso entre Sonaguera y Sabá, por el margen izquierdo, se interrumpió por varias horas, debido al daño en uno de los cabezales. Y en La Ceiba hubo árboles caídos y calles inundadas, lo mismo que en El Porvenir.

    Árboles caídos, calles inundadas y ríos desbordados se podían observar a lo largo del litoral Atlántico.