El Progreso, Yoro
“Amor, estoy en una misión, luego te llamo”, fue la última frase que escuchó de su amado Billy, como era conocido por sus allegados, relató Karen, la pareja sentimental de Denis Mauricio Valdés, el capitán asesinado el jueves en Cofradía.
“No sé cómo voy a salir adelante, teníamos muchos planes, estaba emocionado porque en febrero iniciaba el curso para ascender a su grado inmediato de mayor”, agregó entre lágrimas.
El cadáver de Valdés Rodas (de 34 años) fue retirado de Medicina Forense ayer a las 11:00 am y trasladado a la funeraria Amor Eterno, en El Progreso, Yoro, de donde era originario.
Santos Crecencio Valdés, padre del oficial, dijo que “era muy dedicado a su trabajo y con la familia muy especial, siempre le gustó trabajar para sacar adelante al país”.
El capitán Valdés estaba especializado en varias ramas de las Fuerzas Armadas a nivel internacional y nacional, sobresalió en el curso de tropas especializadas nocturnas, conocido como Tesón. Las Fuerzas Armadas le dieron ayer el ascenso póstumo de capitán a mayor de la Fuerza Aérea Hondureña.
Por ser un oficial destacado pasó del escuadrón Antibombas a jefe de Inteligencia en Copán y en el año 2015 lo asignaron a la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA), adonde sobresalió en las múltiples misiones de capturas a bandas de extorsionadores.
El jueves, estando de franquicia, fue llamado por sus superiores. Ese día se despertó a las 3:00 am, porque una hora más tarde iniciaban las operaciones. Como FNA lograron capturar a un cabecilla de la mara Salvatrucha (MS), pero comprometidos con su trabajo, en la tarde siguieron las misiones y fue cuando por capturar a un extorsionador se quitó el chaleco antibalas para correr más rápido y el criminal le disparó en el abdomen, lo que le provocó la muerte.
Héroe
Valdés y sus compañeros sacaron sus armas para repeler el ataque, pero el extorsionador se escabulló entre niños, por lo que el militar les dio la orden a sus subalternos que no dispararan para evitar herir a los niños
“Él estaba especializado para todo tipo de combates, pero le pudo lo más lo humano y no actuó para no herir a ningún niño”, expresó un oficial de la FNA.
Carlos Alberto Rodríguez, capitán de aviación, recordó que más que compañeros de promoción eran hermanos, porque compartieron muchas vivencias desde que ingresaron en la Academia Militar de Aviación (AMA).
“Era una persona dedicada a todo lo que hacía, era emprendedor y con gran lealtad a la institución; pero como hombres del aire estamos expuestos a este tipo de situaciones, me duele porque éramos buenos amigos,pero ofrendó su vida al país”, expresó el oficial.
