Tegucigalpa, Honduras
Se conocieron desde adolescentes en la aldea La Garza, Apacilagua, Choluteca. Pero el pasar de los años y los deseos de salir adelante los trajeron hasta la capital de la república.
Estudiaron, se graduaron y llegó el momento de formar un hogar.
Carlos Alfonso Baquedano Torres (de 29 años) y Darly Selena Aguilar Rodríguez (de 21) tenían una relación marital de un poco más de tres años. Ayer ese amor llegó a su fin, ambos fueron encontrados sin vida en el interior de un apartamento.
El doble deceso tuvo lugar en la tercera planta de una vivienda en la que además funciona una clínica médica en la colonia Los Alpes, colindante con La Peña por Bajo.
Acababan de salir los primeros rayos del sol cuando se escucharon por todo lo alto las cuatro detonaciones. “Eran las 6:00 am”, dijo un vecino. Unos minutos después, y tras el descubrimiento de la escena, la hipótesis que cobró más fuerza es la de un posible parricidio y posterior suicidio por parte de Carlos Baquedano. Los cuerpos estaban uno junto al otro, Darly quedó boca abajo y Carlos con su rostro hacia arriba.
La joven mujer tenía tres impactos de bala, uno en el tórax y dos en la cabeza que terminaron con su vida.
Carlos solo presentaba un balazo en la sien derecha y un arma de fuego en su mano derecha. Producto de la relación amorosa entre la pareja nació una hija, la que ya tiene dos años.
