Tegucigalpa, Honduras
Tres operadores de justicia de Honduras fueron acusados este martes de estar supuestamente vinculados a actos irregulares y casos de corrupción en Francisco Morazán y Yoro, zona central y norte respectivamente.
El Ministerio Público presentó este martes un antejuicio en contra de una jueza del departamento de Yoro, así como requerimientos fiscales contra un policía y un secretario del tribunal de sentencia de Francisco Morazán.
Tres operadores de justicia de Honduras fueron acusados este martes de estar supuestamente vinculados a actos irregulares y casos de corrupción en Francisco Morazán y Yoro, zona central y norte respectivamente.
El Ministerio Público presentó este martes un antejuicio en contra de una jueza del departamento de Yoro, así como requerimientos fiscales contra un policía y un secretario del tribunal de sentencia de Francisco Morazán.
El antejuicio es contra la jueza Kelia Yolany Fugón Ávila; los requerimientos contra el secretario del Tribunal de Sentencia Héctor Orlando Díaz y el policía Ever Antonio Sánchez Reyes.
A la jueza se le presume responsable del delito de prevaricato ya que, según la Fiscalía, se apartó de la ley para sacar de la cárcel a un imputado que ella misma había condenado el 04 de enero por el delito de evasión.
Fugón Ávila dejó sin efecto el cumplimiento de la condena de 05 años de reclusión que había dictado contra Ever Eliseo Vallecillo Ramírez. A criterio del Ministerio Público la jueza 'con malicia o conciencia de la injusticia dictó sentencia contraria a la ley para favorecer a un encausado en materia penal'.
Al secretario del Tribunal de Sentencia, Héctor Díaz, se le acusó por los delitos de violación de los deberes de los funcionarios y sustracción de objetos a servir de evidencias.
'El funcionario judicial se apropió de 83 mil lempiras que servían como prueba en un caso de extorsión donde se decretó un fallo absolutorio a favor de los imputados, por ende correspondía al encausado custodiar y devolver las evidencias a sus propietarios', dijo Carlos Morazán, portavoz del Ministerio Público.
Al jefe de la subestación policial de Langue, Valle, el policía Ever Antonio Sánchez Reyes, lo acusan por los delitos de cohecho y violación de los deberes de los funcionarios.
'Solicitó y recibió un soborno de 4 mil lempiras de un ciudadano que había sido detenido por manejar en estado de ebriedad', apuntó Morazán.
La acción se hizo a través de la Fiscalía Especial Para el Enjuiciamiento de Funcionarios y Servidores del Sector Justicia (FEEFS-SJ) como continuación de la Operación “Medusa”.
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