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Despiden al más célebre exorcista católico

  • 19 septiembre 2016 /

El sacerdote Gabriele Amorth fundó en 1990 la Asociación Internacional de Exorcistas, reconocida en 2014 por la Santa Sede.

El Vaticano.

El funeral del padre Gabriele Amorth, el exorcista de la diócesis de Roma conocido en todo el mundo, que murió el 16 de septiembre a los 91 años de edad, se realizó ayer en el templo de la parroquia Santuario Santa María Reina de los Apóstoles.

Quizá el exorcista más celebre del mundo con una carrera de 30 años luchando contra el diablo, falleció a los 91 años en Roma en la clínica donde se encontraba ingresado por problemas pulmonares.

Gabriele Amorth nació en 1925 en Módena, se unió a la Sociedad de San Pablo en 1947, se ordenó como sacerdote en 1951 y en 1985 fue nombrado exorcista oficial de la diócesis de Roma.

Fue fundador en 1990 de la Asociación Internacional de Exorcistas (AIE), organización que presidió hasta su retiro en el año 2000 y que solo recientemente fue reconocida jurídicamente por el Vaticano al recibir el visto bueno de la Congregación para el Clero. Actualmente, la AIE cuenta con cerca de 250 exorcistas presentes en una treintena de países.

Amorth fue autor de numerosas obras sobre el exorcismo, la última publicada en español en 2012 bajo el título El último exorcista. Mi batalla contra Satanás. Según una de sus editoriales, el padre Amorth habría realizado unos 160,000 exorcismos. También colaboraba como periodista para la publicación Famiglia Cristiana.

El Vaticano reconoció la AIE en 2014, dando su apoyo a una práctica que no es admitida ni apreciada por todos en el seno de la Iglesia.

El exorcismo es una oración oficial de la Iglesia católica en la que se invoca a Dios y se exige al diablo que libere a una persona determinada.