Honduras

Elecciones internas harán que Libre ponga los pies en la tierra

El que haya mucha gente molesta con la forma en que se ha gobernado Honduras no quiere decir que apoyará a Libre para manifestar su inconformidad, dice el analista político.

    07.04.2014

    El diputado y dirigente de la Democracia Cristiana, Ramón Velásquez Nazar, afirmó que los resultados obtenidos por el partido Libertad y Refundación (Libre) demuestran que no es una fuerza política capaz de ganar el poder.

    Libre estimó que obtendría un millón de votos, pero ni siquiera ha alcanzado el medio millón, según las proyecciones del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

    A juicio de Velásquez, la dirigencia de Libre vivía un mundo de ficción sobre su incidencia política y que los resultados de estas votaciones hará que “pongan los pies sobre la tierra”.

    En entrevista con EL HERALDO, el político también analiza que los exliberales que fundaron Libre jamás comulgarán con las ideas de la izquierda radical de ese partido porque “son como el agua y el aceite”.

    ¿Qué opinión tiene de los resultados obtenidos por Libre en las elecciones internas? Bueno, yo diría que aunque el número de marcas o votos como partido no se iguala a los otros dos partidos, Nacional o Liberal, se ha podido conjuntar la inconformidad de alguna gente en Honduras, porque las posiciones de los dos partidos grandes van en ruta de lo que ha sucedido en Honduras y yo creo que sí hay hondureños que quisieran que las cosas se hicieran de otra manera.

    Eso no significa que vayan a acceder al poder, es obvio que eso no va a ser así, pero sí es una manifestación de inconformidad que hay que ponerle atención.

    ¿Por qué los resultados de las elecciones primarias no le servirán al final a Libre para llegar al poder? Porque si solamente se hace la comparación de (resultados) de partido el número de votos del Partido Nacional y del Partido Nacional son muy superiores a los de Libre; ahora, si yo comparara la candidata de Libre con cualquiera de los otros candidatos de los partidos tradicionales es obvio que sí los números se aproximan, pero las realidades son diferentes porque en el caso de Libre votaron todas las corrientes por un candidato y en el caso de los otros dos partidos votaron por los otros candidatos.

    Si hacemos la sumatoria de la cantidad de personas que concurrieron a depositar su voto es claramente mayor para los partidos tradicionales.


    La dirigencia de Libre aseguraba que iba a lograr un millón de votos. ¿Por qué no se habría logrado? Bueno, yo creo que tenían una mala percepción, yo creo que estimaron mal, no era esa la realidad y probablemente los resultados de ayer en esta elección les sirva a ellos para poner los pies en la tierra y saber qué tipo de trabajo van a realizar si van a captar mayor atención del pueblo hondureño.

    Pero usted dice que los resultados obtenidos por Libre dicen algo. ¿Qué dicen? Es significativo el resultado en el sentido de que ahí se conjuntaron todas las oposiciones y todos los resentimientos que la población tiene con relación a cómo se está manejando el Estado hondureño y creo que ahí concurren un montón de inconformidades que hacen que se aglutinen alrededor de un partido que pareciera que es el que va a dar esa respuesta y es obvio que no es así porque cada quien va con sus propias preocupaciones y no hay ahí una ambición común y objetivos comunes sobre las ambiciones de la sociedad.

    ¿O sea que Libre no representa la voluntad de la mayoría de la sociedad que está insatisfecha con el orden de las cosas?

    No, yo creo que en los otros partidos hay muchas personas insatisfechas y desde sus partidos están tratando de canalizar esas insatisfacciones y tratar que estos otros partidos establezcan rutas para que nos ayuden a enfrentar esos problemas, por ejemplo, yo no creo que la mayoría, si no es que la totalidad de la población no está conforme con los niveles de corrupción a los que hemos llegado y que tampoco nadie está satisfecho con la impunidad que hay, impunidad que no solo tiene que ver con la corrupción, sino que la impunidad que tiene que ver con los delitos comunes, la violencia, la delincuencia, el crimen organizado y otros que existen en el país.

    Ahí en Libre hay inconformes en relación con esos temas, pero también los hay en los otros partidos, entonces, yo no podría pensar que en Libre capte todas esas insatisfacciones de todos los hondureños porque los otros hondureños están en las otras organizaciones tratando de hacer correcciones y que les ayuden a resolver esos problemas.

    ¿Cree que en el futuro Libre pueda convertirse en una fuerza política capaz de ganar unas elecciones generales? Pues yo creo que cualquier grupo organizado puede representar una fuerza y si muestra coherencia entre lo que dice y lo que hace lo puede lograr. Yo tengo la impresión que el pueblo hondureño ha aprendido a engañar a los políticos , yo creo que estamos llegando a un punto en el que ya no podemos estar todos engañados; creo que hemos llegado al punto de decirnos la verdad y, en ese sentido, si Libre actúa de forma coherente y de verdad se va a comprometer con los problemas nacionales y va a actuar conforme a su discurso, creo que Libre y cualquier grupo político va a recibir un apoyo de la población.

    Yo creo que estamos llegando al fondo de los problemas, que tenemos que enfrentarlos partiendo de que todos damos una contribución, pero además que contribuyamos a frenar los altos índices de corrupción que tenemos en nuestra sociedad.

    ¿Podrán hacer amalgama los exliberales con las personas de verdadera izquierda radical que forman parte de Libre? Pues yo creo que no, y las posiciones de los movimientos que están a lo interno de Libre sí son posiciones ideológicas y si ya desde adentro hubo denuncias de que los liberales querían copar el partido Libre y quienes estaban diciendo eso son los que piensan que la doctrina liberal no es suficiente para resolver todos los problemas de Honduras.

    Ahí se gestarán grupos permanentes porque las posiciones son posiciones ideológicas, no solo son posiciones de intereses de personas y al estar mezclados posiciones ideológicas y los intereses de las personas es como mezclar el aceite con el agua y nunca tendrán posibilidades de coincidir.