El pleno del Congreso Nacional aprobó anoche por unanimidad los primeros 41 de los 91 artículos de la Ley Fundamental de Educación, que entre otros aspectos eleva la obligatoriedad de la educación hasta el noveno grado y establece que los docentes deben tener título universitario para ejercer en el sistema público.
El Congreso reanudó las sesiones de la segunda legislatura en su última semana y como tema central está la presente ley, que tuvo el total respaldo de las cinco bancadas, mientras afuera del Congreso, en el centro capitalino, un reducido número de dirigentes magisteriales tuvo una discreta protesta.
La sesión fue convocada para hoy a las once de la mañana.
Los parlamentarios, incluyendo la Unificación Democrática, manifestaron que apoyan a los docentes en sus luchas, pero, a su pesar, en esta ocasión consideran que la ley será el despegue que el país espera en dicha materia porque trae enormes transformaciones para garantizar la gratuidad de la educación, la enseñanza del idioma inglés como obligación, los 200 días mínimos de clases y la contratación de más docentes para poder cumplir esta normativa.
Es gratuita
De acuerdo con el artículo 7 de la ley, la educación ofrecida en los establecimientos oficiales es gratuita: el Estado garantiza su financiamiento. Queda prohibida cualquier
exigencia de contribuciones económicas o de cualquier índole por parte de los docentes o autoridades educativas.
El ocho establece que el Estado está obligado a brindar educación pública al menos desde un año de educación prebásica hasta el nivel medio. El Estado por medio de la de Educación Pública establecerá los mecanismos de cobertura ordenada y progresiva de esta obligación.
Más adelante, el diez obliga a los padres, madres o tutores a hacer que sus hijos, hijas o pupilos en edad escolar cursen al menos un año de educación prebásica, la educación básica y la educación media.
Corresponde a la Secretaría de Educación Pública y a la Secretaría de Desarrollo Social coordinar la política social del Estado para apoyar a los padres, madres o tutores en el cumplimiento de esta obligación cuando fuere necesario.
Según el artículo 15, el Sistema Nacional de Educación está conformado por la educación formal, educación no formal y la educación informal.
Los tres componentes son interdependientes y ofrecen opciones formativas diferentes y complementarias, acordes con los principios de equidad, calidad, pertinencia y eficiencia de la educación y ejecutan acciones educativas que, por su naturaleza, son atendidas por modalidades propias de cada uno de ellos.
De acuerdo con el artículo 16, la educación formal se organiza en una secuencia regular de niveles, con sujeción a pautas curriculares progresivas, conducentes a grados y títulos.
200 días de clases
El año lectivo consta de, al menos, doscientos días de clase u otra unidad de medida equivalente. El año lectivo no podrá darse por concluido, sino hasta completar el número de días establecidos.
La educación formal comprende desde preescolar hasta obtener el título de bachiller en cualquier modalidad o especialidad, desde las edades de 4 a 17 años.
La ley crea el Consejo Nacional de Educación, cuya la responsabilidad es elaborar y dar seguimiento a la política educativa nacional y articular horizontal y verticalmente el Sistema Nacional de Educación; lo preside el Presidente de la República.
El Consejo Nacional de Educación está integrado por el Presidente de la República, el Secretario de Estado en el Despacho de Educación Pública y un representante del Sistema de Educación Superior.
El artículo 32 establece que la administración de los recursos humanos y financieros a cargo de la de Educación Pública se llevará a cabo en forma descentralizada en el nivel departamental.
El 34 señala que el presupuesto de la de Educación Pública debe elaborarse a partir de las propuestas generadas por los Consejos Escolares de Desarrollo de los Centros Educativos. Las directrices que emita la de Más noticias relacionadas
