Las acciones emprendidas por el gobierno de Porfirio Lobo y el presidente del Congreso Juan Orlando Hernández “están atentando contra la democracia y contra el Partido Nacional”.
El expresidenciable Miguel Pastor dijo ayer que no se ha incorporado a la campaña porque no lo han llamado. Pastor declaró que los dirigentes de su partido no pueden pregonar la “unidad total” porque esta “no existe, y no existe porque, de repente, a quienes están manejando el partido no les interesa que exista la unidad total”.
“Yo siempre he luchado por la unidad de mi partido, siempre he aportado a la unidad. Yo quiero que mi partido gane y como quiero que gane por eso estoy señalando estas cosas que no son consecuentes con los nacionalistas que queremos que el partido gane”.
Expresó Pastor que no se ha incorporado a la campaña “porque de repente no me necesitan, esa no es decisión mía. Mi responsabilidad como nacionalista es decirle a mi gente que trabaje por el partido, aspirar a que el partido gane y no compartir las cosas que, a criterio mío, de la mayoría de los cachurecos, no son consecuentes con los intereses del país”.
Dijo que independientemente de que él se adhiera a la causa de Hernández, seguirá siendo un duro crítico de las medidas que su partido está tomando desde el Congreso Nacional porque van contra la Constitución y otras leyes del país.
La Comisión de Campaña del Partido Nacional no lo ha llamado a ocupar filas en esta ocasión porque a lo mejor “no ocupan todos los liderazgos, a todos los nacionalistasm para poder enfrentar esta campaña electoral”, según el exprecandidato presidencial.
En su partido no se puede hablar de unidad total “cuando hay tanta diferencia de criterios”. Por ejemplo, “quien le habla no comparte varias actitudes o varias acciones del presidente de la República”, dijo. Y luego añadió: “Lo he dicho, y lo reitero, espero que el candidato de mi partido no se preste desde el Congreso Nacional a violentar la libertad de expresión, porque el daño se lo va a hacer a mi partido, a miles y miles de nacionalistas, en un tema que no le favorece absolutamente a nadie”.
“No vemos cuál es el interés de atentar contra la Constitución de la República y contra la libertad de expresión”.
