18/04/2024
12:24 AM

El eclipse de luna roja cautivó a toda Honduras

Miles de hondureños en el país esperaron hasta la madrugada para ver la 'luna de sangre'

San Pedro Sula, Honduras

El 'eclipse de la luna roja' se convirtió en todo un fenómeno social en Honduras, pues miles de personas esperaron hasta la madrugada para ver como poco a poco el satélite natural de la tierra se tornaba rojo.

Varios hondureños lo vieron desde sus casas, inundando desde temprano las redes sociales de fotografías y comentarios sobre el eclipse de luna.

Otros miles, se reunieron para verlo desde telescopios en lugares como el Museo para la Infancia el Pequeño Sula en San Pedro Sula o el Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) en Tegucigalpa.

En el El Pequeño Sula, cientos de visitantes llegaron desde las 8:00 pm para compartir una experiencia diferente y contemplar la luna roja.

Ver: ¿Por qué se produce el eclipse de Luna total?

En el museo pusieron tres telescopios a disposición del público para que todos pudiera apreciar los cambios lunares durante la noche y madrugada.

Además los visitantes recibieron charlas explicativas sobre el eclipse, las cuales se brindaron en el planetario del museo, adonde se hizo un 'viaje imaginario a la luna', en el cual se usan efectos de sonido y se presentan imagenes en un domo que simula el espacio, como parte de las actividades.

Era tanta la emoción, que las charlas tuvieron que continuar hasta la medianoche, pues las personas seguían llegando al Pequeño Sula.

Poco después de la 1:00 am la luna alcanzo su color más rojo, lo cual causó la admiración de los presentes, entre los cuales habían niños, adultos, personas de la tercera edad. Además algunos llegaron en familia, otros entre amigos, en pareja o solos. Nadie quiso perderse el hermoso fenómeno.

Luego de contemplar la luna por horas, finalmente a las 2:00 am se fueron todos los visitantes del museo sampedrano para la infancia, que hasta esa hora cerró sus puertas.

A pesar de esto, desde sus casas miles de hondureños continuaron apreciando el eclipse lunar, hasta que finalmente casi a las 4:00 am la luna volvió a verse con su color blanco natural.

Lea: Pastor dice que las lunas de sangre son apocalípticas

Así concluyó una jornada en que los hondureños mostraron toda su pasión por la astronomía y en la que por una noche, se dejaron conquistar por la luna. El próximo 8 de octubre habrá otro eclipse de luna, el cual podrá también ser apreciado en Honduras.

Diario La PRENSA dio cobertura al fantástico suceso, compartiendo con los hondureños en lugares como el museo El Pequeño Sula.

Por su sitio web y twitter estuvo constantemente mostrando espectaculares fotografías de los cambios de la luna y además transmitió el eclipse en vivo a millones de personas en su sitio LAPRENSA.hn estableciendo un enlace con el sitio que la agencia estadounidense Nasa, puso en internet para contemplar el eclipse de la luna roja.

El continente americano pudo ver esta madrugada un eclipse total de la Luna, que duró unos 78 minutos y fue retransmitido en directo por la NASA en conexión con el Marshall Space Flight Center de Alabama (Estados Unidos).

El astrofísico de la NASA Alphonse Sterling dijo que el eclipse total, en el que la Luna pudo verse de un intenso color rojo, duró una hora y 18 minutos y que había empezado la fase en la que el satélite está recuperando su habitual brillo amarillo.

Este eclipse, que empezó hacia las 07.00 GMT y duró menos que otros recientes de hasta 107 minutos hace dos décadas, se pudo ver desde toda América y es el primero de una tétrada de lunas rojas que se repetirá prácticamente cada seis meses hasta dentro de año y medio, un fenómeno que sólo ocurrirá siete veces en este siglo, según la NASA.

Los eclipses totales de la Luna se producen cuando hay un alineamiento casi perfecto entre el Sol, la Tierra y la Luna, al proyectar la Tierra su sombra sobre el satélite cuando está en fase de Luna llena, un fenómeno poco frecuente que se produjo, el último de ellos, el 10 de diciembre de 2011.

Sin embargo, la Luna no desaparece de la vista, sino que se tiñe de rojo, porque la atmósfera de la Tierra filtra la luz solar y deja pasar sólo el rojo, que se proyecta sobre la Luna.