19/04/2024
06:58 PM

Fuertes lluvias dejan desastres en la capital

Hay unas 300 familias en riesgo por el derbordamiento de la quebrada el sapo

Tegucigalpa. Las lluvias que cayeron la tarde del sábado y noche del domingo produjeron severos daños en las zonas vulnerables de la capital.

La precipitación que dejó unos 40 milímetros de agua causó el desbordamiento de la quebrada El Sapo y dañó casas en la colonia Los Profesores, Zapote Norte, Zapote Centro, Tres de Mayo, Fuerzas Unidas y Mirador de Oriente.

La madrugada del domingo, el Cuerpo de Bomberos reportó el desprendimiento de piedras en el kilómetro 10 de la carretera al norte, a inmediaciones de la aldea La Cuesta, que le causó daños parciales a un vehículo.

En la colonia Mirador de Oriente, en la salida a Danlí, una vivienda se desplomó y la base de otra se socavó por la crecida del caudal cercano, informaron.

En este eje también cayeron rocas en el pavimento.

El alcalde capitalino Ricardo Álvarez informó que por medio los elementos del Comité de Emergencia Municipal se atendió y se proveyó de frazadas y colchonetas a los afectados de la Tres de Mayo.

Denunció que el punto negro de la jornada fue la inseguridad, pues organismos de socorro aclararon que no pudieron penetrar a ciertas zonas, como Fuerzas Unidas, El Chile y Mirador de Oriente, por la delincuencia.

Cabe mencionar que para hoy lunes se esperan las mismas condiciones del fin de semana -cielo muy nublado, lluvia y actividad eléctrica-, según el Servicio Nacional de Meteorología.

Riesgo

Aproximadamente 300 familias quedan al borde de la muerte por los problemas en Los Profesores.

Álvarez señaló que el Fondo Hondureño de Inversión Social quedó como responsable de la obra, por lo que le compete a este órgano analizar las medidas.

En Lomas de El Cortijo, los vecinos ya entregaron al Cuerpo de Bomberos una carta de exoneración para retirar una peligrosa piedra. Las labores de limpieza continuaban ayer en la capital, especialmente en los mercados.

Desde temprano, cuadrillas municipales y locatarios de los mercados comenzaron la tarea de retirar desechos y lodo que trajo el desbordamiento de la quebrada El Sapo.