El dengue vuelve arreciar en la ciudad y en los municipios aledaños. Solo en el hospital Mario Rivas están internos diez niños con síntomas de esta enfermedad.
Reina Velásquez cuida a su hija de ocho años en la sala de emergencia pediátrica, que desde el lunes está interna por salir positiva en la prueba del dengue.
La pequeña extraña su aula de clases en Choloma, adonde reside, pero su madre confía que mejore de salud esta semana para que se reincorpore a su vida cotidiana.
David Mendoza, jefe de turno la sala de pediatría del Rivas, dijo que tienen tres casos sospechosos de dengue grave, más conocido como hemorrágico. “Los pacientes permanecen internos bajo vigilancia médica alrededor de tres días”.
En la emergencia
del Mario Rivas, los médicos internos reportaban otros siete casos de adultos.
Julio Rodríguez, director de la Región Metropolitana de Salud de San Pedro Sula, manifestó que la mayoría de casos que llegan al Rivas no son de la ciudad, sino de municipios aledaños.
“En esta época lluviosa, los zancudos se multiplican por las aguas. Motivamos a los ciudadanos para que revisen los recipientes en los solares de sus hogares”, recomendó.
Según Rodríguez, antes de las lluvias el nivel de infestación de larvas de zancudos en las casas sampedranas era del 6% y hoy con el clima lluvioso se disparó al 16%.
