Los malos olores y la contaminación que ha generado una alcantarilla de aguas negras destruida en la 7 calle, 3 avenida del Barrio Guamilito parece no importarles a las autoridades de Aguas de San Pedro.
Pese a que el problema de aguas negras en esta calle ha sido repetitivo durante años, con el tiempo ha empeorado, las aguas residuales cubren la 7 calle, además de las vías adyacentes, situación que causa el repudio de las personas que
circulan a diario por esta zona. Los olores son nauseabundos y se esparcen en el viento por horas, días y hasta semanas.
Cuando los vehículos transitan a toda velocidad levantan las aguas servidas, salpicando a los peatones con la suciedad.
“Hace poco yo iba pasando por esa calle y
un carro me mojó con agua sucia”, se quejó una dama.
Las últimas lluvias han agudizado el problema, la mezcla de las aguas lluvias con las aguas negras generan la proliferación de zancudos en la zona, lo que causa temor a un brote de dengue en las personas que laboran en los edificios cercanos a la cloaca.
Las cuadrillas de Aguas de San Pedro en diferentes ocasiones han trabajado en la cloaca, pero no han solucionado el problema. Sacan grandes cantidades de agua sucia y la esparcen en las calles, lo que causa más insalubridad.
Se espera que con esta denuncia las autoridades manden a trabajar en lo que sean necesario para erradicar el problema de una vez por todas y así poder evitar que las calles se vean anegadas
de aguas negras.
Ver más noticias sobre Honduras
