A pesar de las extensas filas, miles de personas cumplieron su promesa de visitar la imagen del “Señor del buen fin”, con la fe puesta en Dios que las cosas mejorarán.
Este martes concluyó en la aldea Quezailica, jurisdicción del municipio de Santa Rosa, la tradicional feria patronal.
Durante cinco días, miles de locales y nacionales acudieron no solo a las múltiples celebraciones organizadas sino también a adorar al Cristo Negro de Quezailica.
Tulio César Batres, presidente del patronato de la referida aldea, aseguró que “durante estos cinco días fueron miles los que nos visitaron, a lo largo de la semana el pueblo estuvo copado de visitantes, la afluencia ha sido enorme”.
Este año los problemas de ubicación de comerciantes fue solucionado, puesto que los diferentes locales fueron distribuidos a lo largo de toda la aldea, facilitando así el paso de los transeúntes.
“De las metas que nos pusimos cumplimos al menos el 95%”, explicó Batres, quien aseguró que múltiples actividades sociales, culturales y eclesiásticas se realizaron durante la semana.
En la iglesia de Quezailica, centenares de pobladores se aglutinaron para adorar la imagen del Cristo Negro. Extensas filas de personas se formaron en las cercanías del altar, donde se recogieron miles de promesas escritas en papel, arreglos florales y velas encendidas.
“Pedimos a Dios no solo por nuestras familias sino también para que nos ayude a sacar este país adelante”, dijo Elvin Pineda, mientras lograba tocar las piernas de la imagen del “Señor del Buen Fin”.
Las autoridades municipales aseguraron que la alcaldía invirtió más de 10,000 lempiras para la celebración de la fiesta patronal.
