La tradición de leer un libro o de poder observar las bibliotecas abarrotadas por jóvenes estudiando, se ha perdido.
Los mesones y las sillas de las bibliotecas de la ciudad durante la mayor parte del día, permanecen casi vacías.
Adonay Antonio Peña, quien está a cargo de la biblioteca infantil de la Casa de Cultura en Santa Rosa de Copán, dijo que ha notado que “en los últimos años, la afluencia de usuarios ha disminuido significativamente”. Indicó que de acuerdo con el control de visitas, quienes hacen todavía uso de la biblioteca son estudiantes entre los 9 hasta los 16 años, es decir, los estudiantes que cursan el plan básico y primaria.
Los libros que más buscan son los de las clases básicas de primaria, como cívica, estudios sociales y ciencias naturales y en menor escala también buscan español y a veces psicología, según explicó el encargado. Unos 147 jóvenes visitaron la biblioteca durante junio.
“Antes era mucho mayor, porque cuando no era tan accesible el uso del Internet, las bibliotecas pasaban más llenas y había más interés de parte de los usuarios en buscar la información en libros”, refirió el entrevistado.
