La Ceiba. Luego de 52 años de convivir juntos y procrear ocho hijos, María Candelaria Argueta y Gerardo Reyes Alemán dieron el importante paso de casarse por lo civil.
El estar convaleciente no fue impedimento para que don Gerardo acudiera puntual a la cita. Llegó en su silla de ruedas a formalizar ante la ley su unión con el amor de su vida.
Los eternos enamorados aprovecharon el Festival del Amor organizado por la comuna ceibeña para dar el importante paso, al igual que 37 parejas más que se dieron el ‘sí acepto’ en el evento que se celebró en la Plaza Central.
La actividad estaba planificada para el 14 de febrero, Día de San Valentín, pero fue pospuesta debido al mal tiempo que imperó.
Romántico enlace
La ceremonia fue presidida por el vicealcalde, Ángel Munguía, y el secretario Municipal, Janios Cruz.
También estuvieron presentes los regidores Marlene Sánchez, Carla Dip, Mario Contreras y Héctor Mejía.
La Unidad Turística Municipal fue la responsable de que el esperado acontecimiento se llevara a cabo y fuera una fecha inolvidable para los contrayentes.
Un camino de flores fue decorado para que los novios hicieran su entrada acompañados por los cadetes de la Academia Naval. Luego de que aceptaran el compromiso, lo sellaron con un beso y los aplausos de sus familiares y amistades y los efusivos gritos fueron alicientes para los novios en un inolvidable día.
Parejas ejemplares
El sacerdote Ivis Castillo ofreció un mensaje a las parejas. “En una sociedad en donde nadie se quiere comprometer, ustedes son un ejemplo; el matrimonio es difícil, pero con amor y respeto se vive en armonía especial en la familia”, dijo el padre.
Al finalizar el mensaje, los recién casados bailaron el vals de Las Mariposas. Posteriormente por cortesía de casas comerciales se rifaron premios entre las parejas, como electrodomésticos, estadías en hoteles, viajes a Cayos Cochinos, entre otros.
Los novios también tuvieron su pastel de boda, antes de saborearlo aprovecharon para tomarse fotografías y tener un especial recuerdo de ese día.
La compañía Tigo patrocinó el concierto de la agrupación sampedrana Son Son Límite que amenizó con una fiesta bailable durante varias horas.
“Somos una marca familiar y una empresa socialmente responsable, este es el segundo año consecutivo que apoyamos este festival y lo seguiremos haciendo”, manifestó Leopoldo Vivas, gerente de mercadeo de Tigo.
“Estoy muy feliz de cumplir mi sueño de casarme con la mujer que amo”, dijo Hernán Ricardo Morales, quien unió su vida con María Máxima Ortiz.
Nahúm Ponce, director de la Unidad Turística Municipal, manifestó que por dos meses se prepararon para realizar el evento.
Decenas de familiares y amistades de los esposos los acompañaron y disfrutaron del especial enlace gratuito ofrecido por la Municipalidad de La Ceiba por segundo año consecutivo.
