19/04/2024
12:37 PM

Da a luz una niña minutos después de llegar al Rivas

Más de 15 niños y seis adultos fueron trasladados hasta el Mario Rivas; varios pacientes relatan lo vivido.

Con sus cuerpos aún templados y desconcertados reaccionaron ayer algunos pacientes que fueron transferidos del Instituto Hondureño de Seguridad Social hacia el hospital Mario Catarino Rivas, luego de un incendio que puso de correr al centro asistencial.

Los galenos del Rivas reaccionaron rápidamente y atendieron con agilidad a las personas que fueron transportadas por las ambulancias y las patrullas.

Al menos unos 14 niños fueron ingresados, y se esperaba que la cifra aumentará en el transcurso de la noche. En las salas de emergencia de medicina interna y cirugía se atendieron a seis personas, según informaron los médicos de turno.

Momentos de pánico

En la improvisada sala de pediatría que se habilitó en el Rivas, el llanto de los menores tenía preocupados a sus padres, quienes daban gracias a Dios por no permitir una tragedia en el hospital. El personal médico y de enfermería corrían de un lado a otro, para atender a los enfermitos que iban llegando.

Yamileth Paz, madre de un menor de 9 años que acaba de ser operado de apendicitis, dijo que aún no entiende cómo logró bajar las gradas y poner a salvo a su hijo.

Según relató “hasta los quebrados salieron corriendo del pánico y de la desesperación”.

“Nos preocupamos cuando se fue la luz, la gente comenzó a gritar, decían que el hospital se estaba quemando, yo cargué a mi hijo y salí corriendo del lugar, el niño solo lloraba y me decía que tenía miedo, pensamos que todo se iba a caer sobre nosotros”, manifestó Paz.

Sentada en una silla plástica, desde donde vigilaba a su pequeña de tan solo cuatro meses de nacida quien dormía en una de las cunas del área que se habilitó en el Mario Rivas, encontramos a Cindy Mejía, una joven que vivió ayer junto a cientos de pacientes el susto de su vida.

La madre explicó que de pronto se escuchó un estallido y luego todo quedó en silencio.

“Yo solo le pedía a Dios que nos cuidara a todos, que no permitiera que la gente muriera en este lugar”, explicó con voz quebrantada Mejía.

David Mendoza, pediatra del Mario Rivas, explicó que desde que se dio a conocer lo ocurrido en el Seguro Social, comenzaron a preparar las salas donde se alojarían los pacientes.

“Nos dijeron que vendrían entre 20 a 25 niños del Seguro, nosotros ya estábamos preparados con camillas, medicamento y personal de este centro para atender a los pacientes”.

Mendoza manifestó que a pesar que estas situaciones no se habían presentado en otras ocasiones, el personal del hospital respondió bien ante la emergencia. “Hemos respondido. Los niños estarán en el hospital hasta que el Seguro Social nos diga”.

“Salí cojeando del IHSS”

El longevo de 62 años, Andrés Romero, es uno de los afectados por el incendio del Seguro, ayer descansaba en una de las camas de la sala de emergencia de Cirugía del Rivas.

Al recordar los minutos de angustia qué pasó, le era difícil creer que pese a que acababa de ser amputado de tres dedos del pie izquierdo, tuvo que salir corriendo de la sala de recuperación con el fin de ponerse a salvo.

En medio de la desesperación y el susto, la parturienta Glenda Jessenia Cabrera, 34, dio a luz por medio de cesárea a una niña minutos después de haber sido ingresada al Mario Rivas. La bebé que debía nacer en el IHSS, no esperó y vio la luz del mundo en este centro hospitalario.