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Unos 300 hondureños reciben apoyo psiquiátrico a diario

  • 27 agosto 2016 /

Expertos dicen que unos 3.5 millones de hondureños padecen enfermedades mentales. El hospital que más pacientes atiende es el Mario Mendoza

Tegucigalpa, Honduras.

A causa del estigma y de las presiones en el propio seno familiar por padecer una enfermedad mental, miles de hondureños no están acudiendo a buscar atención médica, lo que aleja las posibilidades de resolver los trastornos y orillarse a una depresión que puede acabar en un suicidio.

América Chirinos, directora del Hospital Psiquiátrico de Agudos Mario Mendoza, dijo que a diario están atendiendo a 300 personas que llegan en busca de salud mental.

“Estas personas están viniendo a consulta en el hospital de día, los internos aquí son 101, casos que en la mayoría se recuperan y vuelven después de unas semanas a sus casas”, explicó la psiquiatra.

El Mario Mendoza, hospital más grande del país en atención de trastornos mentales, ofrece atención en psicología, psicoterapia y psiquiatría.

Los expertos afirman que 3.5 millones de hondureños están padeciendo de enfermedades mentales; pero apenas una baja cantidad está recibiendo atención médica.

“Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 40% de las personas acuden a un nivel primario de atención por problemas psiquiátricos. De ese porcentaje, no todos vienen a recibir atención al Mario Mendoza, muchos van a clínicas privadas, por lo que es muy difícil de determinar”, agregó la experta.

La atención

Mientras esperaba su turno para ser atendida, una señora de la tercera edad tomaba de la mano a su esposo para conducirlo al baño. No quiso identificarse, pero manifestó que una vez por semana asiste al hospital porque su esposo olvida todo.

Así como esta pareja de ancianos, cientos de hondureños llegan desde varios puntos del país a recibir atención médica, dejando a un lado los comentarios de la población que también podrían estar padeciendo algún trastono mental.

“Me molesta que en mi casa me digan que estoy loca. No lo estoy, busco ayuda porque paso muy deprimida. Aquí me dan medicamentos hasta para dormir porque ni eso puedo”, dijo Gladys, una joven de apenas 16 a­ños que esperaba su turno.

Los casos más crónicos son trasladados al Hospital Santa Rosita, ubicado en Támara, Francisco Morazán, el que también cuenta con una clínica de desintoxicación.

“Aquí se mantiene el promedio de consultas a diario, aunque hay que reconocer que cada día más personas obtienen información de las enfermedades mentales y buscan ayuda. Muchas personas están buscando ayuda solo para combatir el estrés, y esto es una buena noticia”, indicó la doctora.

En lo que respecta a la salud mental dirigida desde la Secretaría de Salud, se supo que este departamento fue abolido y su personal trasladado a otra instancia.

LA PRENSA intentó en reiteradas ocasiones conocer las estadísticas de tratamientos de enfermedades mentales a nivel nacional y los centros u hospitales disponibles; pero la secretaria de Salud, Yolany Batres, no estuvo disponible para dar esta información.