San Pedro Sula, Honduras.
Después de permanecer siete años atado a una silla de ruedas, René Zúniga, de 60 años, volvió a caminar ayudado por una prótesis.
La diabetes hizo de las suyas y afectó su organismo, sobre todo su pierna izquierda.
Las ulceras que aparecieron provocaron que los médicos le amputaran la pierna y desde entonces quedó en silla de ruedas. El regidor José Jaar conoció la historia y decidió apoyar al sexagenario dándole una prótesis para que tuviera mejor calidad de vida.
Fausta Torres, esposa de Zúniga, dice que procrearon cuatro hijos y recordó que desde hace 20 años la diabetes se ensañó con él.
La familia reside en la colonia La Puerta y agradecen el gesto que tuvo el médico y regidor al ayudar a don René, ya que su vida mejorará con la prótesis en la pierna izquierda. Don René ahora buscará retomar su antiguo estilo de vida y ganar ingresos en su casa.
Después de permanecer siete años atado a una silla de ruedas, René Zúniga, de 60 años, volvió a caminar ayudado por una prótesis.
La diabetes hizo de las suyas y afectó su organismo, sobre todo su pierna izquierda.
Las ulceras que aparecieron provocaron que los médicos le amputaran la pierna y desde entonces quedó en silla de ruedas. El regidor José Jaar conoció la historia y decidió apoyar al sexagenario dándole una prótesis para que tuviera mejor calidad de vida.
Fausta Torres, esposa de Zúniga, dice que procrearon cuatro hijos y recordó que desde hace 20 años la diabetes se ensañó con él.
La familia reside en la colonia La Puerta y agradecen el gesto que tuvo el médico y regidor al ayudar a don René, ya que su vida mejorará con la prótesis en la pierna izquierda. Don René ahora buscará retomar su antiguo estilo de vida y ganar ingresos en su casa.
