La Lima, Honduras.
Para antes que culmine 2016, la Municipalidad por medio de la empresa Aguas de La Lima espera tener abastecido en un 100% con ese líquido a la población del casco urbano.
La proyección de las autoridades se basa en un plan que ejecutan desde hace unos meses, cuya primera etapa fue la construcción de cuatro pozos de agua y que esta semana continúa con la construcción de igual número de tanques.
Uno de estos está en la colonia Jerusalén, por años los vecinos de ese lugar han consumido agua con sabor salado, con el nuevo sistema que comprende tanque y una nueva red, el problema terminará.
Julio César Muñoz, gerente de Aguas de La Lima, informó que esa obra comenzó el lunes, “esa colonia es prioridad, los pobladores esperan ansiosos el nuevo sistema, ya no quieren tomar agua salada que sale por medio de bombas de un sector, en esta ocasión se probó en otro predio y esta tiene un sabor normal”.
El proyecto es ejecutado por la empresa Lempira, ganadora de una licitación en la cual participaron otras firmas.
El funcionario agregó que los tanques se construirán también en las colonias La Cusuca, Municipal y Vivero Municipal, todas en el casco urbano.
“Son más de 30,000 habitantes que tendrán un servicio de calidad, la meta es que antes que termine este año todo el sistema esté funcionando al 100% y con ello se terminen las quejas por la escasez que se ha venido presentando”, apuntó.
Muñoz detalló que en la perforación de pozos invirtieron nueve millones de lempiras, mientras en los tanques y redes se gastarán 18 millones de lempiras.
Aguas de La Lima tiene 10,400 abonados de una población en todo el municipio de 90,000 personas.
La comuna también realiza estudios para mejorar varios sistemas de aguas negras y la instalación de nuevos.
La limeña Maritza Fuentes es de la opinión que ojalá la inversión que realiza la alcaldía dé el efecto esperado, ya que están cansados de padecer por este problema, el cual algunos días llega agua y en otros no.
Mientras eso ocurre las juntas administradoras de sus propios proyectos trabajan en la protección de sus fuentes naturales.
Para antes que culmine 2016, la Municipalidad por medio de la empresa Aguas de La Lima espera tener abastecido en un 100% con ese líquido a la población del casco urbano.
La proyección de las autoridades se basa en un plan que ejecutan desde hace unos meses, cuya primera etapa fue la construcción de cuatro pozos de agua y que esta semana continúa con la construcción de igual número de tanques.
Uno de estos está en la colonia Jerusalén, por años los vecinos de ese lugar han consumido agua con sabor salado, con el nuevo sistema que comprende tanque y una nueva red, el problema terminará.
Julio César Muñoz, gerente de Aguas de La Lima, informó que esa obra comenzó el lunes, “esa colonia es prioridad, los pobladores esperan ansiosos el nuevo sistema, ya no quieren tomar agua salada que sale por medio de bombas de un sector, en esta ocasión se probó en otro predio y esta tiene un sabor normal”.
El proyecto es ejecutado por la empresa Lempira, ganadora de una licitación en la cual participaron otras firmas.
El funcionario agregó que los tanques se construirán también en las colonias La Cusuca, Municipal y Vivero Municipal, todas en el casco urbano.
“Son más de 30,000 habitantes que tendrán un servicio de calidad, la meta es que antes que termine este año todo el sistema esté funcionando al 100% y con ello se terminen las quejas por la escasez que se ha venido presentando”, apuntó.
Muñoz detalló que en la perforación de pozos invirtieron nueve millones de lempiras, mientras en los tanques y redes se gastarán 18 millones de lempiras.
Aguas de La Lima tiene 10,400 abonados de una población en todo el municipio de 90,000 personas.
La comuna también realiza estudios para mejorar varios sistemas de aguas negras y la instalación de nuevos.
La limeña Maritza Fuentes es de la opinión que ojalá la inversión que realiza la alcaldía dé el efecto esperado, ya que están cansados de padecer por este problema, el cual algunos días llega agua y en otros no.
Mientras eso ocurre las juntas administradoras de sus propios proyectos trabajan en la protección de sus fuentes naturales.
