San Pedro Sula, Honduras.
Pese a que este año hubo un sustancial aumento en el presupuesto destinado al Registro Nacional de las Personas (RNP), la oficina regional de San Pedro Sula sigue padeciendo lo mismos males de años anteriores.
Una de las oficinas más afectadas, de las 320 que hay en todo el país, es la de San Pedro Sula, donde ir a tramitar una partida de nacimiento o una tarjeta de identidad es cada vez más complicado debido a la escasez de material.
Los usuarios se quejan que luego de enormes filas, expuestos al sol, se enteran que no hay materiales.
Miguel Villeda, director nacional del RNP, dijo a LA PRENSA que la falta de disponibilidad presupuestaria es lo que desde hace mucho tiempo está afectando las funciones del Registro.
“Formalmente el presupuesto incrementó para el 2016, anda arriba de los L679 millones, pero no es un presupuesto que tenemos fijo en una cuenta bancaria, sino que esperamos a que finanzas haga el desembolso para poder disponer de el”.
Detalló que por la elaboración de cada tarjeta de identidad, la institución tiene una inversión de L550.
“En Francisco Morazán, al mes estamos emitiendo unas 30,000 cédulas y solo para San Pedro Sula alrededor de 23,000, un número grande si tenemos presente que la población de la ciudad anda por los 700,000 habitantes”.
Medidas
En cuanto a la insuficiencia de tinta para la emisión de certificados de nacimiento que hay desde hace casi dos semanas en la Capital Industrial y otros municipios, Villeda refirió que está listo un desembolso de L40,000 para la compra del insumo, y así enviarlo a las distintas oficinas del país a más tardar a inicios de la próxima semana.
Esa partida solo permitirá abastecer por uno o dos meses las oficinas.
El funcionario indicó que para sobrellevar la situación han implementado acciones, como la disminución de viajes a las oficinas regionales, reducción del envío de documentos con personal de la entidad para reemplazarlo por encomiendas.
Además de medidas menores que van desde pedir a las autoridades de cada centro el empleo racional de los aires acondicionados y el menor uso posible del sistema eléctrico.
Melissa Santos, registradora civil, manifestó que localmente han reducido las impresiones de documentos y hacen mayor uso del correo electrónico.
Pese a que este año hubo un sustancial aumento en el presupuesto destinado al Registro Nacional de las Personas (RNP), la oficina regional de San Pedro Sula sigue padeciendo lo mismos males de años anteriores.
Una de las oficinas más afectadas, de las 320 que hay en todo el país, es la de San Pedro Sula, donde ir a tramitar una partida de nacimiento o una tarjeta de identidad es cada vez más complicado debido a la escasez de material.
Los usuarios se quejan que luego de enormes filas, expuestos al sol, se enteran que no hay materiales.
Miguel Villeda, director nacional del RNP, dijo a LA PRENSA que la falta de disponibilidad presupuestaria es lo que desde hace mucho tiempo está afectando las funciones del Registro.
“Formalmente el presupuesto incrementó para el 2016, anda arriba de los L679 millones, pero no es un presupuesto que tenemos fijo en una cuenta bancaria, sino que esperamos a que finanzas haga el desembolso para poder disponer de el”.
Detalló que por la elaboración de cada tarjeta de identidad, la institución tiene una inversión de L550.
“En Francisco Morazán, al mes estamos emitiendo unas 30,000 cédulas y solo para San Pedro Sula alrededor de 23,000, un número grande si tenemos presente que la población de la ciudad anda por los 700,000 habitantes”.
Medidas
En cuanto a la insuficiencia de tinta para la emisión de certificados de nacimiento que hay desde hace casi dos semanas en la Capital Industrial y otros municipios, Villeda refirió que está listo un desembolso de L40,000 para la compra del insumo, y así enviarlo a las distintas oficinas del país a más tardar a inicios de la próxima semana.
Esa partida solo permitirá abastecer por uno o dos meses las oficinas.
El funcionario indicó que para sobrellevar la situación han implementado acciones, como la disminución de viajes a las oficinas regionales, reducción del envío de documentos con personal de la entidad para reemplazarlo por encomiendas.
Además de medidas menores que van desde pedir a las autoridades de cada centro el empleo racional de los aires acondicionados y el menor uso posible del sistema eléctrico.
Melissa Santos, registradora civil, manifestó que localmente han reducido las impresiones de documentos y hacen mayor uso del correo electrónico.
