En cuatro días volverá a caminar el periodista hondureño Félix Molina después que ayer resultara herido de bala en un atentado en Tegucigalpa.
Uno de los cirujanos de la emergencia de cirugía del Hospital Escuela explicó que 'en unos tres o cuatro días el paciente podrá caminar ya que en estos momentos aún está inflamado de ambos muslos donde recibió los disparos y tiene dolor que ira disipándose'.
Molina sufrió dos heridas de arma en la pierna derecha y dos más en la pierna izquierda, todos con orificio de entrada y de salida. 'Los plomos no tocaron hueso, venas o arterias de ambas extremidades inferiores por lo que no necesitara de intervención quirúrgica', según Miguel Osorio, vocero del Hospital Escuela.
El comunicador que trabaja como periodista independiente y apoya a diversas emisoras de radio comunitarias de su país se encuentra bajo resguardo policial.
En 2013 Félix Molina fue galardonado con Premio Samuel Chavkin para la Integridad en el Periodismo Iberoamericano, otorgado por el Congreso Norteamericano sobre América Latina (NACLA).
Antes del atentado
Unas seis horas antes del atentado, Molina hizo circular un mensaje en el que decía que 'un hombre y una mujer, jóvenes, armados, no tienen feriado en el semáforo del Clarión', un hotel de Tegucigalpa.
'No hay policías, ni militares. El taxista espera turno en el semáforo, es un día caliente y uno se siente algo pesado. Dos malabaristas golpean machetes falsos enfrente de todos y distraen y atraen', añade el mensaje.
'La joven rubia se desliza sigilosa con el arma en la mano pegada al taxi, mientras el hombre tira de mi brazo derecho y me ordena entregarle el teléfono y, a la vez, ordena a la mujer !disparale!'.
'El conductor, que los sigue por el retrovisor, arranca, brusco, oportuno, y escapamos de los rapaces. !ufff, el país que habitamos!', indicó Molina.
Más tarde, en el mismo sector, sufrió el atentado, indicó Molina a Efe en la breve comunicación telefónica.
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