El verano inició y las altas temperaturas arrecian en la Capital Industrial. Las preguntas sobre el suministro de agua en la ciudad comienzan a surgir y la buena noticia es que el gerente de la concesionaria Aguas de San Pedro, Maurizio Chiovelli, dice que aunque el derroche de agua sigue siendo un gran problema, el vital líquido está garantizado.
Actualmente cada habitante consume un promedio de 416 litros diarios, lo normal es 130 según el gerente. El ejecutivo conversa con LA PRENSA sobre la situación de los acuíferos.
No sufriremos por escasez de agua ni racionamientos como en otras ciudades, debido a que San Pedro Sula cuenta con mayores fuentes subterráneas que pueden suplir el déficit de las fuentes superficiales.
Podríamos sufrir de algunas interrupciones del servicio debido a causas externas como: cortes de energía eléctrica, problemas de voltaje, uso irracional, debido a la imposibilidad de controlar las áreas no medidas y problemas propios del cambio climático.
El estado de los acuíferos no ha tenido variaciones sustanciales. Tenemos agua subterránea de reserva, tenemos pozos de reservas y con los niveles de los acuíferos estamos bien para la tranquilidad de todos.
La cantidad actual de agua es suficiente para abastecer la ciudad, sin embargo, el uso incontrolado, pegues ilegales, así como la falta de medición son factores que inciden negativamente en el servicio y por lo tanto, la empresa se ve obligada a buscar continuamente nuevas fuentes de agua subterránea.
La concesionaria cuenta con 118 mil usuarios.
Las zonas de mayor consumo son los sectores no medidos como Chamelecón, Cofradía, sector de la Rivera Hernández, además un sector de Calpules.
No se ha logrado controlar, ya que tenemos la necesidad de una ordenanza municipal que obligue a medir a todos los usuarios, lo que no se mide no se puede controlar.
Son datos privados.
Los sampedranos pueden estar seguros, ya que toda el agua distribuida es apta para consumo humano, y de acuerdo a los parámetros de la Norma Técnica Nacional para la Calidad del Agua.
En este momento, las represas están en su máxima capacidad. El porcentaje de los pozos es de 60 por ciento y las fuentes superficiales en un 40 por ciento. En época de verano la relación es 80/20.