San Pedro Sula, Honduras.
En cada misa, los obispos y sacerdotes de la diócesis piden orar por las vocaciones ante la necesidad de más curas y religiosas.
El obispo Ángel Garachana dice que se siente contento con el trabajo que como Iglesia se hace; pero llama a los sacerdotes, laicos y los responsables de la Pastoral Vocacional en las parroquias a encontrar más jóvenes con inquietud vocacional.
En la diócesis hay sacerdotes jóvenes que han impregnado en las parroquias un espíritu diferente de dirigirlas y que están atrayendo más fieles.
El padre Luis Estévez, párroco de Chamelecón, motiva a los jóvenes y las familias a conocer más de la vida religiosa y motivarse a servir. “Lo que tenemos es poco comparado con la población de San Pedro Sula, que crece cada día más.
Se necesita urgentemente que todos promovamos las vocaciones en nuestras casas, familias, iglesias y todos los medios para tener más personas al servicio de la Iglesia”, indicó. Este año ingresaron 10 jóvenes al seminario mayor que se suman a los 30 que ya habían empezado sus estudios sacerdotales.
Al seminario menor han entrado doce aspirantes que van avanzando en el proceso de discernimiento.
Datos de la Pastoral Vocacional establecen que en San Pedro Sula hay 12 parroquias a cargo de padres diocesanos, de los cuales 13 son hondureños, cinco españoles y cuatro colombianos.
El párroco de la catedral, José Antonio Canales, también se unió al llamado para que las familias motiven a sus hijos a servir a la Iglesia.
En cada misa, los obispos y sacerdotes de la diócesis piden orar por las vocaciones ante la necesidad de más curas y religiosas.
El obispo Ángel Garachana dice que se siente contento con el trabajo que como Iglesia se hace; pero llama a los sacerdotes, laicos y los responsables de la Pastoral Vocacional en las parroquias a encontrar más jóvenes con inquietud vocacional.
En la diócesis hay sacerdotes jóvenes que han impregnado en las parroquias un espíritu diferente de dirigirlas y que están atrayendo más fieles.
El padre Luis Estévez, párroco de Chamelecón, motiva a los jóvenes y las familias a conocer más de la vida religiosa y motivarse a servir. “Lo que tenemos es poco comparado con la población de San Pedro Sula, que crece cada día más.
Se necesita urgentemente que todos promovamos las vocaciones en nuestras casas, familias, iglesias y todos los medios para tener más personas al servicio de la Iglesia”, indicó. Este año ingresaron 10 jóvenes al seminario mayor que se suman a los 30 que ya habían empezado sus estudios sacerdotales.
Al seminario menor han entrado doce aspirantes que van avanzando en el proceso de discernimiento.
Datos de la Pastoral Vocacional establecen que en San Pedro Sula hay 12 parroquias a cargo de padres diocesanos, de los cuales 13 son hondureños, cinco españoles y cuatro colombianos.
El párroco de la catedral, José Antonio Canales, también se unió al llamado para que las familias motiven a sus hijos a servir a la Iglesia.
