San Pedro Sula, Honduras.
El 2016 es considerado el año del despegue en infraestructura de San Pedro Sula, y con la culminación del segundo anillo se empieza a materializar. La construcción del segundo anillo es una de las obras más esperadas por los sampedranos, inició en la década de los 90 y no se había logrado concretar pese a los intentos.
El proyecto se logró reanudar recuperando la vigencia del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), luego que el Gobierno de la república asignara la coordinación y ejecución a Invest/Cuenta del Milenio. El financiamiento es mediante un convenio de financiamiento suscrito con el Gobierno y el BID. El monto de las obras incluyendo el reasentamiento de las 174 familias asciende a más de 350 millones de lempiras.
La habilitación se tiene planificada para el 18 de marzo y se contará con la presencia del presidente de la república, Juan Orlando Hernández, y otras autoridades.
El mandatario hondureño manifestó que está satisfecho con la obra porque los sampedranos se merecen eso y por ello este año se anunciarán inversiones históricas en infraestructura.
“Sabemos que hay un rezago en obras, pero estos proyectos más lo que ya está haciendo Siglo 21, que es la primera Alianza Público Privada (App), en la ciudad revolucionarán la capital industrial”. Esas son las obras que necesita la ciudad y con ello el despegue es impresionante porque llegaremos a los barrios y colonias para mejorar las condiciones de vida de los sampedranos”, aseguró.
El presidente de Colegio de Ingenieros Civiles, Martín Mayorquín, dice que este tipo de obras vienen a fomentar el desarrollo de la ciudad, por lo que, el Gobierno debe seguir apoyando esas iniciativas en la zona que más aporta al producto interno bruto.
“Las autoridades municipales deben enfocar sus objetivos en desarrollar otro tipo de obras de esta magnitud que complementen la inversión del Gobierno”, añadió.
Los trabajos del segundo anillo consisten en la construcción de una nueva calzada de dos carriles adicionales a los ya existentes en el tramo que va desde la sexta calle hasta Industrias Gala, que incluye la construcción de los puentes sobre río Bermejo y río Blanco, con una longitud de 5.5 kilómetros.
El 2016 es considerado el año del despegue en infraestructura de San Pedro Sula, y con la culminación del segundo anillo se empieza a materializar. La construcción del segundo anillo es una de las obras más esperadas por los sampedranos, inició en la década de los 90 y no se había logrado concretar pese a los intentos.
El proyecto se logró reanudar recuperando la vigencia del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), luego que el Gobierno de la república asignara la coordinación y ejecución a Invest/Cuenta del Milenio. El financiamiento es mediante un convenio de financiamiento suscrito con el Gobierno y el BID. El monto de las obras incluyendo el reasentamiento de las 174 familias asciende a más de 350 millones de lempiras.
La habilitación se tiene planificada para el 18 de marzo y se contará con la presencia del presidente de la república, Juan Orlando Hernández, y otras autoridades.
El mandatario hondureño manifestó que está satisfecho con la obra porque los sampedranos se merecen eso y por ello este año se anunciarán inversiones históricas en infraestructura.
“Sabemos que hay un rezago en obras, pero estos proyectos más lo que ya está haciendo Siglo 21, que es la primera Alianza Público Privada (App), en la ciudad revolucionarán la capital industrial”. Esas son las obras que necesita la ciudad y con ello el despegue es impresionante porque llegaremos a los barrios y colonias para mejorar las condiciones de vida de los sampedranos”, aseguró.
El presidente de Colegio de Ingenieros Civiles, Martín Mayorquín, dice que este tipo de obras vienen a fomentar el desarrollo de la ciudad, por lo que, el Gobierno debe seguir apoyando esas iniciativas en la zona que más aporta al producto interno bruto.
“Las autoridades municipales deben enfocar sus objetivos en desarrollar otro tipo de obras de esta magnitud que complementen la inversión del Gobierno”, añadió.
Los trabajos del segundo anillo consisten en la construcción de una nueva calzada de dos carriles adicionales a los ya existentes en el tramo que va desde la sexta calle hasta Industrias Gala, que incluye la construcción de los puentes sobre río Bermejo y río Blanco, con una longitud de 5.5 kilómetros.
