San Pedro Sula, Honduras.
Aunque en San Pedro Sula, unos 112 barrios, colonias y residenciales tienen trancas y portones para blindarse contra la inseguridad, las autoridades reiteran que esta medida es ilegal y atenta contra la libre locomoción del ciudadano.
Hace más de dos años que pobladores de muchos barrios y colonias comenzaron a cerrar las entradas y salidas principales o de sus calles y pasajes como una forma de contrarrestar los actos ilícitos en sus zonas.
Esta acción, de acuerdo con vecinos, fue copiada de las residenciales, donde los muros, portones o trancas están incluidos en el proyecto desde su concepción.
Actualmente, de 700 barrios, colonias y residenciales en la ciudad, 112 están bajo este concepto, que para algunos ha dado grandes beneficios.
“Cuando no teníamos portones pasaban asaltando, no teníamos tranquilidad. Ahora, todo es diferente. La verdad es que nos ha cambiado la vida”, indicó Yolanda Leiva, miembro del comité de seguridad de la colonia Ideal.
En esta zona, 53 familias pagan desde hace dos años L400 al mes para gozar de vigilancia privada.
Hay vecinos que preliminarmente se opusieron a la instalación de los portones, sin embargo, se ha llegado a una conciliación, afirma Leiva.
Otros como Rafael Prado, de la colonia El Roble, opinan que no hay una sana convivencia, que los límites puestos no son necesarios, ya que los malhechores siempre buscan hacer de las suyas.
“Dicen que es por los ladrones. Ya no hay libertad para salir, caminar. Creo que no tenemos nada que temer, pues en esta cuadra nunca ha habido un asalto”, señaló. El debate sobre los portones y trancas entre residentes continúa. Hay quienes opinan que la seguridad lo compensa todo; otros expresan que esta medida obstaculiza el libre paso y que no contribuye a la disminución de los hechos delictivos.
Según datos de la División de Investigación y Estadística Municipal (Diem), en estos 112 sectores residen más de 120 mil personas.
La Sandoval, Ciudad Nueva, Satélite, Guadalupe, Ideal, Modelo, San Carlos de Sula, Las Brisas y Felipe Zelaya son parte de la lista de las colonias donde habitan personas luchadoras que hacen un esfuerzo económico para pagar por su seguridad.
No habrá reglamento
A excepción de las residenciales que se construyen bajo las directrices de Urbanismo Municipal y tienen la venia para hacerlas circuito cerrado, los barrios y colonias que cuentan con portones o trancas están “ilegales” porque la Municipalidad no aprueba la medida; es decir, que están sujetos a sanciones y hasta el retiro indefinido de los mismos. Roberto Romero Luna, gerente de Prevención, Seguridad y Transporte, manifestó entender el objetivo de los ciudadanos al instalar límites en los accesos; sin embargo, confirmó que la alcaldía no ha emitido ningún permiso para poder hacerlo.
“Socializamos con los vecinos para resolver el problema entre ellos y retiramos los portones si la denuncia procede”. En lo que va de este año, la comuna registra cuatro denuncias de las colonias Jardines del Valle, Altiplano, Aurora y la Ideal por portones.
Luna detalló que ya fue elaborado un reglamento para regular la instalación y uso de estos mecanismos, pero no ha sido sometido a aprobación por la Corporación Municipal. “No ha sido aprobado por la Corporación Municipal. No creo que sea aprobado porque sentimos que la ciudad no puede estar sometida a este tipo de instrumentos físicos porque evidenciamos la falta de confianza y seguridad”, explicó.
Jorge Rodríguez Montoya, portavoz de la Policía en la zona norte, declaró que, aun con los portones y trancas, hay colonias en las que ha habido asaltos y robos a casas, por lo que recomienda a los sampedranos denunciar cualquier suceso a la línea 911.
Aunque en San Pedro Sula, unos 112 barrios, colonias y residenciales tienen trancas y portones para blindarse contra la inseguridad, las autoridades reiteran que esta medida es ilegal y atenta contra la libre locomoción del ciudadano.
Hace más de dos años que pobladores de muchos barrios y colonias comenzaron a cerrar las entradas y salidas principales o de sus calles y pasajes como una forma de contrarrestar los actos ilícitos en sus zonas.
Esta acción, de acuerdo con vecinos, fue copiada de las residenciales, donde los muros, portones o trancas están incluidos en el proyecto desde su concepción.
Actualmente, de 700 barrios, colonias y residenciales en la ciudad, 112 están bajo este concepto, que para algunos ha dado grandes beneficios.
“Cuando no teníamos portones pasaban asaltando, no teníamos tranquilidad. Ahora, todo es diferente. La verdad es que nos ha cambiado la vida”, indicó Yolanda Leiva, miembro del comité de seguridad de la colonia Ideal.
En esta zona, 53 familias pagan desde hace dos años L400 al mes para gozar de vigilancia privada.
Hay vecinos que preliminarmente se opusieron a la instalación de los portones, sin embargo, se ha llegado a una conciliación, afirma Leiva.
Otros como Rafael Prado, de la colonia El Roble, opinan que no hay una sana convivencia, que los límites puestos no son necesarios, ya que los malhechores siempre buscan hacer de las suyas.
“Dicen que es por los ladrones. Ya no hay libertad para salir, caminar. Creo que no tenemos nada que temer, pues en esta cuadra nunca ha habido un asalto”, señaló. El debate sobre los portones y trancas entre residentes continúa. Hay quienes opinan que la seguridad lo compensa todo; otros expresan que esta medida obstaculiza el libre paso y que no contribuye a la disminución de los hechos delictivos.
Según datos de la División de Investigación y Estadística Municipal (Diem), en estos 112 sectores residen más de 120 mil personas.
La Sandoval, Ciudad Nueva, Satélite, Guadalupe, Ideal, Modelo, San Carlos de Sula, Las Brisas y Felipe Zelaya son parte de la lista de las colonias donde habitan personas luchadoras que hacen un esfuerzo económico para pagar por su seguridad.
No habrá reglamento
A excepción de las residenciales que se construyen bajo las directrices de Urbanismo Municipal y tienen la venia para hacerlas circuito cerrado, los barrios y colonias que cuentan con portones o trancas están “ilegales” porque la Municipalidad no aprueba la medida; es decir, que están sujetos a sanciones y hasta el retiro indefinido de los mismos. Roberto Romero Luna, gerente de Prevención, Seguridad y Transporte, manifestó entender el objetivo de los ciudadanos al instalar límites en los accesos; sin embargo, confirmó que la alcaldía no ha emitido ningún permiso para poder hacerlo.
“Socializamos con los vecinos para resolver el problema entre ellos y retiramos los portones si la denuncia procede”. En lo que va de este año, la comuna registra cuatro denuncias de las colonias Jardines del Valle, Altiplano, Aurora y la Ideal por portones.
Luna detalló que ya fue elaborado un reglamento para regular la instalación y uso de estos mecanismos, pero no ha sido sometido a aprobación por la Corporación Municipal. “No ha sido aprobado por la Corporación Municipal. No creo que sea aprobado porque sentimos que la ciudad no puede estar sometida a este tipo de instrumentos físicos porque evidenciamos la falta de confianza y seguridad”, explicó.
Jorge Rodríguez Montoya, portavoz de la Policía en la zona norte, declaró que, aun con los portones y trancas, hay colonias en las que ha habido asaltos y robos a casas, por lo que recomienda a los sampedranos denunciar cualquier suceso a la línea 911.
