16/04/2024
10:21 PM

Los genios hondureños que crearon a Jarvis

San Pedro Sula, Honduras.

Que usted entre a su casa y diga “encender televisor” y que así ocurra sin necesidad de tener un control remoto es increíble, pero cierto.

Incluso puede prender y apagar las luces de su vivienda sin hacer mayor esfuerzo que pedirlo con el habla.

Y ya es una realidad en Honduras. Cinco brillantes colegiales de San Pedro Sula lo han desarrollado con el apoyo de su profesor de Informática mientras realizaban un proyecto para la feria de Ciencia y Tecnología en el Centro Técnico Hondureño Alemán (CTHA). Le denominaron Jarvis.

Los creadores son adolescentes con mucha creatividad. Algunos con talento para combinar destrezas musicales y técnicas, pero sobre todo con una enorme capacidad para trabajar en equipo, según sus autoridades.

Original

Aunque muchos hoy en día creen que tal situación es normal en teléfonos móviles y algunas aplicaciones de smartphones, lo que estos sampedranos de 16 a 18 años lograron va más allá de un programa automatizado.

Ellos son Lesly Castillo, Mariana Ramírez, Kimberly Hernández, Mario Rodríguez y Fernando Del Cid, todos estudiantes de tercero de bachillerato técnico en Electrónica del CTHA.

Los cinco jóvenes trabajaron fuerte en armar la maqueta de luces que debía encender su programa.
“Lo curioso de este sistema es que se logra fusionar un programa informático con un sistema eléctrico para que las órdenes que reciba alteren la realidad de una persona físicamente”, explica Henry García, profesor asesor.

Los jóvenes mandaron a comprar a Asia la tarjeta electrónica y demás herramientas para que aparatos eléctricos pudieran accionar con la programación que ellos diseñaron. Todo con el esfuerzo de sus padres.

La tarea más complicada fue armar pieza por pieza y superar el desafío. “Hace unos meses no teníamos definido lo que queríamos hacer, pero cuando vimos el proyecto de Jarvis nos decidimos por él, principalmente porque puede ayudar en el futuro a personas con discapacidades”, dice Lesly Castillo, una de las genios. Les tardó alrededor de dos meses realizarlo, pero la satisfacción de la efectividad del aparato hizo que todo valiera el esfuerzo.

Los menores les dan el crédito de su invento a las enseñanzas de alta calidad de sus profesores de Electrónica y también de Informática, pues tienen el conocimiento para la programación.

Los jóvenes talentosos sueñan con salir con éxito del Técnico Alemán y pulir sus conocimientos en las universidades con ingenierías en esta materia. Esperan tener la logística suficiente para que Jarvis sea útil para miles de hondureños.