Tegucigalpa, Honduras.
Ya van 31 días de crisis. La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) vive momentos de crisis histórica si se considera que durante ocho años se impuso la gobernabilidad y la paz ante cualquier interés.
Ayer, la rectora Julieta Castellanos anunció la suspensión de actividades académicas y administrativas por hoy en la Unah-vs, Ciudad Universitaria y en el Centro Universitario Regional del Litoral Pacífico (CURLP). No obstante, el sábado se reanudan.
Hoy se reúne el Consejo Universitario en Tegucigalpa para definir, entre otros asuntos, la modificación de la tabla de unidades valorativas.
Castellanos aseguró que la crisis corresponde a una agenda política, no académica. Este punto ya había sido denunciado hace dos semanas. “Sabemos que ha habido reuniones de dirigentes estudiantiles, tanto de Tegucigalpa, como de la Unah-vs, con dirigentes de Libre. Por lo tanto, ellos están detrás de esta maniobra. Ellos creen que en el país viene un cambio total, un cambio de Gobierno, de las instituciones. En ese sentido, lo que ellos están planteando es que la Universidad será gobernada por este grupo”.
La reacción de la rectora Castellanos ocurrió horas después de que agentes de la Policía Nacional y militares llegaran a los predios de la Unah, acompañados de representantes de derechos humanos, para desalojar a personas que desde tempranas horas llegaron encapuchadas a tomarse los edificios A1, A2, B1, C1, C2, C3, I1, D1 y D2, y, por tanto, a agudizar la crisis.
“La presencia de militares y policías en la Unah fue para proteger la integridad de las personas que estaban en las instalaciones, incluyendo dos extranjeros”, refirió.
Conflicto
El primero de julio comenzó la crisis en la Unah-vs con la toma de las instalaciones por parte de cierto grupo de estudiantes de Odontología, quienes pedían mejores condiciones en el área clínica.
Dicha situación dio pie a que otras carreras, como Medicina, se sumaran a las protestas pidiendo la derogació de la tabla de unidades valorativas y condiciones dignas para todos.
A pesar que a los 22 días de la toma se emitió una orden de desalojo de huelguistas, que fue coordinada por la Policía Nacional y el Ejército, al día siguiente estas personas se tomaron los edificios y desde ahí la crisis no ha tenido fin.
Ayer, a eso de las 3:15 pm, encapuchados sacaron sin hacer uso de violencia a las personas que se encontraban en diversos edificios. La intención era que los escucharan en una asamble estudiantil.
La postura fue la misma: diálogo, pero sin imposiciones de las autoridades y la derogación de la tabla de unidades valorativas.
“La crisis se debe a que la rectoría ha sido intransigente con los estudiantes. Mañana, en la reunión del Consejo Universitario, tienen una oportunidad para resolver todo este mal. Ella impuso que para el diálogo del 4 de agosto solo atenderá a 10 representantes y esto es antidemocrático porque no es incluyente”, dijo una encapuchada a través del micrófono.
Crucial
Francisco Herrera, director de la Unah-vs, manifestó que hoy es un día decisivo, por lo que se determinará en el Consejo Universitario.
“Están presentes todos los decanos de facultades, directores de los centros regionales, representante docente por cada decanato de facultad y un representante estudiantil por cada centro y decanato. Cada integrante tiene un suplente. Esto se hace una vez al mes y este grupo es la máxima autoridad universitaria”.
El tema principal será la modificación de la tabla de unidades valorativas. Herrera aclaró que la existencia de esta no será discutida.
Al cierre de esta edición trascendió que hubo un altercado entre un estudiante y un policía que supuestamente ingresó al predio de la Unah-vs sin ninguna orden de desalojo. LA PRENSA constató anoche la presencia de tres patrullas de Policía Nacional y una de la Policía Militar en las afueras de la Universidad.
