San Pedro Sula, Honduras.
Aferrado a Dios y tranquilo, así dijo el exalcalde sampedrano Rodolfo Padilla Sunseri que pasó su primera noche en el centro penal sampedrano.
“Ya se imagina cómo pasé esa noche, pero tranquilo, aferrándome a Dios y a las personas que me han demostrado su cariño”, manifestó ayer el exalcalde al arribar al Tribunal de Sentencia impecablemente vestido y sereno.
El exmilitante liberal no especificó si fue recluido en una celda de privilegio o en las colectivas en las que están los reos comunes.
El otrora jefe de la comuna sampedrana de 2006 a 2009 se encuentra preso bajo la medida de detención judicial. Ayer fue llevado en una patrulla penitenciaria al juzgado para que se siga el proceso por el cual está enjuiciado junto con otros tres exfuncionarios municipales por supuestos actos de corrupción.
Al ingresar a la sala en la que se desarrolla el debate era esperado por su madre, esposa, amigos y seguidores. LA PRENSA le consultó cómo pasó su primera noche en el recinto penitenciario.
“Soy una persona tranquila, algún propósito de Dios habrá en todo esto. A mi familia que me ha acuerpado le he dicho que de mí no tienen que avergonzarse, ni la gente sampedrana tampoco cuando fui alcalde. Creo que mi pecado fue pasarme de bueno”, expresó minutos antes de que comenzara la audiencia de juicio oral.
El Ministerio Público presentó requerimiento fiscal contra Padilla Sunseri por malversación de caudales públicos y abuso de autoridad.
La acusación se basó en una auditoría que efectuó el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) en el departamento de Control de Ingresos de la alcaldía que reveló que el exalcalde aprobó un préstamo por L400,000 a la entonces jefa de esa dependencia Ada Esperanza Muñoz. “Fue un préstamo personal que ella había solicitado, los empleados solicitan préstamos, uno por humanidad lo hace. Tengo entendido que ese dinero ya fue pagado en su totalidad. Hay un reglamento del sindicato y hay cláusulas, los abogados son los que se encargarán de eso”, explicó. Respecto a la orden de captura emitida en su contra ante la petición de la Fiscalía al Juzgado, dijo que fue sumamente raro, ya que no tenía conocimiento de dónde o por qué venía”.
“Es del conocimiento público que eso fue por efecto de hacer un show, yo fui el objeto de ese show, del mundo político y de las situaciones que se viven acá en Honduras. Ese fue de un requerimiento puesto la noche anterior -martes- e hicieron esa orden de captura hasta altas horas de la noche. Yo siempre he dicho que encaro mis responsabilidades, espero de que se haga justicia independientemente de cualquier cosa”, expresó Padilla.
“Espero que se puedan deducir las responsabilidades pertinentes y que no haya presión externa y que se tome una decisión justa. Confío plenamente en Dios, tengo la frente en alto, no tengo por qué sentirme avergonzado de nada”, aseguró.
Suspenden juicio
El juicio siguió ayer contra Padilla Sunseri, Serapio Umanzor, Marco Antonio Bermúdez Wills y Luis Alonso López Euceda, a quienes la Fiscalía acusa por presunta malversación de caudales públicos y abuso de autoridad.
El debate fue nuevamente suspendido debido a que un testigo propuesto por el Ministerio Público no compareció.
El argumento que dieron los fiscales es que el testigo, un perito que dará testimonio de una auditoría, se encuentra de vacaciones. Los jueces reprogramaron la audiencia de debate para el 21 y 22 de este mes a las 9:00 am en el edificio del palacio judicial ubicado en la 33 calle en el cuadrante sureste de la ciudad.
En las horas que duró el juicio, la Fiscalía presentó una auditoría hecha en el período de enero a julio de 2006, con la cual pretende probar que se malversaron L4,256,500 en la administración de Padilla Sunseri.
En dicha autoría se mostró que se crearon 31 contratos de servicios de limpieza vial, 20 cuando fungió como alcalde Óscar Kilgore y 11 en el período de Rodolfo Padilla. Dichos contratos fueron llenados y luego se hizo la partida presupuestaria para pagarlos.
Mientras se desarrollaba el juicio, Padilla Sunseri se sintió mal, por lo que una vez finalizado fue atendido por un médico. Luego fue trasladado nuevamente al presidio.
Aferrado a Dios y tranquilo, así dijo el exalcalde sampedrano Rodolfo Padilla Sunseri que pasó su primera noche en el centro penal sampedrano.
“Ya se imagina cómo pasé esa noche, pero tranquilo, aferrándome a Dios y a las personas que me han demostrado su cariño”, manifestó ayer el exalcalde al arribar al Tribunal de Sentencia impecablemente vestido y sereno.
El exmilitante liberal no especificó si fue recluido en una celda de privilegio o en las colectivas en las que están los reos comunes.
El otrora jefe de la comuna sampedrana de 2006 a 2009 se encuentra preso bajo la medida de detención judicial. Ayer fue llevado en una patrulla penitenciaria al juzgado para que se siga el proceso por el cual está enjuiciado junto con otros tres exfuncionarios municipales por supuestos actos de corrupción.
Al ingresar a la sala en la que se desarrolla el debate era esperado por su madre, esposa, amigos y seguidores. LA PRENSA le consultó cómo pasó su primera noche en el recinto penitenciario.
“Soy una persona tranquila, algún propósito de Dios habrá en todo esto. A mi familia que me ha acuerpado le he dicho que de mí no tienen que avergonzarse, ni la gente sampedrana tampoco cuando fui alcalde. Creo que mi pecado fue pasarme de bueno”, expresó minutos antes de que comenzara la audiencia de juicio oral.
 Antes de ser llevado al presidio, Padilla se despidió de su esposa, simpatizantes lo acompañaron.
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La acusación se basó en una auditoría que efectuó el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) en el departamento de Control de Ingresos de la alcaldía que reveló que el exalcalde aprobó un préstamo por L400,000 a la entonces jefa de esa dependencia Ada Esperanza Muñoz. “Fue un préstamo personal que ella había solicitado, los empleados solicitan préstamos, uno por humanidad lo hace. Tengo entendido que ese dinero ya fue pagado en su totalidad. Hay un reglamento del sindicato y hay cláusulas, los abogados son los que se encargarán de eso”, explicó. Respecto a la orden de captura emitida en su contra ante la petición de la Fiscalía al Juzgado, dijo que fue sumamente raro, ya que no tenía conocimiento de dónde o por qué venía”.
“Es del conocimiento público que eso fue por efecto de hacer un show, yo fui el objeto de ese show, del mundo político y de las situaciones que se viven acá en Honduras. Ese fue de un requerimiento puesto la noche anterior -martes- e hicieron esa orden de captura hasta altas horas de la noche. Yo siempre he dicho que encaro mis responsabilidades, espero de que se haga justicia independientemente de cualquier cosa”, expresó Padilla.
“Espero que se puedan deducir las responsabilidades pertinentes y que no haya presión externa y que se tome una decisión justa. Confío plenamente en Dios, tengo la frente en alto, no tengo por qué sentirme avergonzado de nada”, aseguró.
 Exalcalde Rodolfo Padilla Sunseri fue captado dentro del penal.
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El juicio siguió ayer contra Padilla Sunseri, Serapio Umanzor, Marco Antonio Bermúdez Wills y Luis Alonso López Euceda, a quienes la Fiscalía acusa por presunta malversación de caudales públicos y abuso de autoridad.
El debate fue nuevamente suspendido debido a que un testigo propuesto por el Ministerio Público no compareció.
El argumento que dieron los fiscales es que el testigo, un perito que dará testimonio de una auditoría, se encuentra de vacaciones. Los jueces reprogramaron la audiencia de debate para el 21 y 22 de este mes a las 9:00 am en el edificio del palacio judicial ubicado en la 33 calle en el cuadrante sureste de la ciudad.
En las horas que duró el juicio, la Fiscalía presentó una auditoría hecha en el período de enero a julio de 2006, con la cual pretende probar que se malversaron L4,256,500 en la administración de Padilla Sunseri.
En dicha autoría se mostró que se crearon 31 contratos de servicios de limpieza vial, 20 cuando fungió como alcalde Óscar Kilgore y 11 en el período de Rodolfo Padilla. Dichos contratos fueron llenados y luego se hizo la partida presupuestaria para pagarlos.
Mientras se desarrollaba el juicio, Padilla Sunseri se sintió mal, por lo que una vez finalizado fue atendido por un médico. Luego fue trasladado nuevamente al presidio.
