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OEA: 'Con la ONU vamos a ser facilitadores del diálogo”

  • 02 julio 2015 /

Tegucigalpa, Honduras.

Hay que buscar instancias de diálogo en Honduras para evitar alteraciones en la democracia, afirmó el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.

Sostuvo que es dialogando como se debe buscar el fortalecimiento institucional y la máxima transparencia para garantizar la estabilidad del Gobierno y el buen funcionamiento de la democracia.

Almagro se refirió al particular en una entrevista a la cadena estadounidense de televisión CNN en la que habló sobre el apoyo que darán la OEA y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para facilitar el diálogo contra la corrupción en el país.

“Con Naciones Unidas vamos a participar, vamos a ser facilitadores del diálogo que va a tener lugar en Honduras. Esperamos que la mayor parte de la sociedad civil participe y que los partidos políticos también participen”, dijo.

El representante de la OEA afirmó que espera que las instancias que surjan del diálogo abierto “produzcan mejores condiciones de transparencia, las condiciones de legitimidad que se precisan en el marco de la democracia”.

El pasado lunes, la OEA y la ONU confirmaron que participarán como facilitadores en el proceso de diálogo convocado por el presidente Juan Orlando Hernández para discutir medidas que permitan optimizar el combate a la corrupción.

“La OEA va a seguir evaluando el sistema de seguridad ciudadana en Honduras, usted sabe que Honduras es el único país que ha completado dos faces de evaluación por parte de la OEA”.

Tercera evaluación

Reveló que “se nos acaba de solicitar la tercera evaluación, la cual comprende a los operadores de justicia, facilitadores judiciales a la implementación de la profesionalización de la Policía en una etapa superior”.

“La OEA está muy involucrada en los principales temas políticos de Honduras y obviamente procurando generar las instancias de diálogo y solución a conflictos que puedan llevar a las soluciones”.

Sostuvo que ello permitirá “que estos discursos no sean utilizados para alterar la democracia, que el resultado de los mismos sea el fortalecimiento institucional, la máxima transparencia, la máxima legitimidad de los Gobiernos; y esto hace un buen funcionamiento de la democracia”.