San Pedro Sula, Honduras.
Todo empezó una tarde de Semana Santa en la pila de su casa. Decidió grabar con unos amigos la forma en que disfrutaba de sus vacaciones en “pilamar” y lo subió a su Facebook.
A partir de allí, Johana Paola Mejía (14), mejor conocida como Chiki 504, se ha convertido en un fenómeno de las redes sociales.
Simpática y tímida por momentos, la adolescente nacida en San Pedro Sula ha logrado obtener en solo una semana más de 65,000 seguidores en su página pública de Facebook y más de 25,000 en Instagram, generando un sinfín de memes en torno a sus videos.
“Mis amigos ahora temen que no les vuelva a hablar por lo famosa que me he vuelto, pero les insisto que soy humilde”, manifestó.
Fama
Su frase célebre “sea humilde, Chiki”, ha quedado grabada en el vocabulario de cientos de hondureños, quienes incluso suben sus fotos en situaciones similares a la joven con su expresión. Luego de debutar con el video en la pila de su casa, grabó otro en su cocina preparándose panes con mantequilla. Después dio consejos a sus seguidoras sobre cómo plancharse el cabello de forma “humilde” y dejó entrever lo mucho que disfruta un paseo en un autobús.
El ingenio para representar la sencillez y originalidad con que un joven sampedrano disfruta su diario vivir ha impactado en las redes sociales.
Sus seguidores le piden videos en diversas situaciones y ella asegura que ya tiene pensados otros, pero “son una sorpresa”. “Mis padres están al tanto de lo que hago y siempre me piden que tenga precaución. Trato de tomar las medidas de seguridad”.
Ayer, la intrépida princesa de las redes sociales compartió con sus seguidores su visita a una radio sampedrana e incluso la mención que el equipo Real España le hizo por su repentina fama. Lo curioso de todo es que para la pequeña videobloguera sus publicaciones son un entretenimiento más que no le quitan el sueño. Más que estudiar periodismo o ser presentadora de televisión, desea convertirse en una experta chef para preparar los platillos más deliciosos, aunque sus favoritos, como buena sampedrana, son el pollo chuco, las baleadas y las pastas.
“Si para algo sirve esta fama, ojalá fuera para hacer reflexionar a los jóvenes para que dejen las malas amistades y estudien como lo hago yo. Quisiera que nuestro país cambie las condiciones en que está en todos los aspectos”, finalizó.
Todo empezó una tarde de Semana Santa en la pila de su casa. Decidió grabar con unos amigos la forma en que disfrutaba de sus vacaciones en “pilamar” y lo subió a su Facebook.
A partir de allí, Johana Paola Mejía (14), mejor conocida como Chiki 504, se ha convertido en un fenómeno de las redes sociales.
Simpática y tímida por momentos, la adolescente nacida en San Pedro Sula ha logrado obtener en solo una semana más de 65,000 seguidores en su página pública de Facebook y más de 25,000 en Instagram, generando un sinfín de memes en torno a sus videos.
“Mis amigos ahora temen que no les vuelva a hablar por lo famosa que me he vuelto, pero les insisto que soy humilde”, manifestó.
 Paola Mejía en el parque de la zona donde vive en San Pedro Sula. Foto: Jordan Perdomo.
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Su frase célebre “sea humilde, Chiki”, ha quedado grabada en el vocabulario de cientos de hondureños, quienes incluso suben sus fotos en situaciones similares a la joven con su expresión. Luego de debutar con el video en la pila de su casa, grabó otro en su cocina preparándose panes con mantequilla. Después dio consejos a sus seguidoras sobre cómo plancharse el cabello de forma “humilde” y dejó entrever lo mucho que disfruta un paseo en un autobús.
El ingenio para representar la sencillez y originalidad con que un joven sampedrano disfruta su diario vivir ha impactado en las redes sociales.
Sus seguidores le piden videos en diversas situaciones y ella asegura que ya tiene pensados otros, pero “son una sorpresa”. “Mis padres están al tanto de lo que hago y siempre me piden que tenga precaución. Trato de tomar las medidas de seguridad”.
Ayer, la intrépida princesa de las redes sociales compartió con sus seguidores su visita a una radio sampedrana e incluso la mención que el equipo Real España le hizo por su repentina fama. Lo curioso de todo es que para la pequeña videobloguera sus publicaciones son un entretenimiento más que no le quitan el sueño. Más que estudiar periodismo o ser presentadora de televisión, desea convertirse en una experta chef para preparar los platillos más deliciosos, aunque sus favoritos, como buena sampedrana, son el pollo chuco, las baleadas y las pastas.
“Si para algo sirve esta fama, ojalá fuera para hacer reflexionar a los jóvenes para que dejen las malas amistades y estudien como lo hago yo. Quisiera que nuestro país cambie las condiciones en que está en todos los aspectos”, finalizó.
