Tegucigalpa, Honduras.
La reanudación de las obras del proyecto hidroeléctrico de Patuca III es incierta en vista que el Gobierno no ha logrado materializar los 298 millones de dólares que se requieren para la continuidad de la estratégica y monumental obra energética.
En una entrevista concedida a LA PRENSA en enero pasado, el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep), Roberto Ordóñez, aseguró que las obras se retomarían el primer trimestre de este año; pero a esta fecha no hay visos que el proyecto se reactive por la falta de financiamiento.
Este diario conoció que todavía no ha sido posible finiquitar el préstamo de 298 millones con un banco de la República Popular de China, de hecho la empresa estatal no cuenta con los fondos para pagar las millonarias indemnizaciones pendientes a los propietarios de las tierras afectadas por el embalse.
Ordóñez indicó en aquel momento que si no se lograba avanzar en el financiamiento, se optaría por una alianza público-privada para poder terminarlo.
Patuca III estaba planificado para entregarse en diciembre de 2013, al final del período del expresidente Porfirio Lobo Sosa; sin embargo, los contratiempos de índole económico paralizaron las obras.
Leonardo Deras, gerente técnico de la Enee, dijo a LA PRENSA desconocer la fecha exacta de la reanudación del proyecto en virtud que “falta concluir el financiamiento con China, y de eso no tengo información”.
Agregó que los trabajos se encuentran paralizados desde finales de 2013, ya que los 50 millones de dólares iniciales solo alcanzaron para terminar la primera fase de la represa, que consistió en el revestimiento de los estribos laterales de la montaña, la construcción del túnel de derivación del río y la casa de máquinas.
Derroche
Sigfrido Sandoval, miembro de la comisión de energía del Colegio de Ingenieros Mecánicos, Electricistas y Químicos de Honduras (Cimeqh), deploró el estancamiento de Patuca III y dijo que lastimosamente los 50 millones de dólares con los que arrancó el embalse se derrocharon en un proyecto de viviendas para los ingenieros y técnicos y muy poco se avanzó en la obra como tal.
Aseveró que ni siquiera se logró concluir la desviación del río Patuca, que era una de las obras concebidas en la primera etapa y tampoco se ha pagado a los dueños de las tierras afectadas. “En fin el proyecto es un total descalabro, porque no se ha logrado conseguir los 300 millones de dólares para terminarlo”, dijo.
La reanudación de las obras del proyecto hidroeléctrico de Patuca III es incierta en vista que el Gobierno no ha logrado materializar los 298 millones de dólares que se requieren para la continuidad de la estratégica y monumental obra energética.
En una entrevista concedida a LA PRENSA en enero pasado, el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep), Roberto Ordóñez, aseguró que las obras se retomarían el primer trimestre de este año; pero a esta fecha no hay visos que el proyecto se reactive por la falta de financiamiento.
Este diario conoció que todavía no ha sido posible finiquitar el préstamo de 298 millones con un banco de la República Popular de China, de hecho la empresa estatal no cuenta con los fondos para pagar las millonarias indemnizaciones pendientes a los propietarios de las tierras afectadas por el embalse.
Ordóñez indicó en aquel momento que si no se lograba avanzar en el financiamiento, se optaría por una alianza público-privada para poder terminarlo.
Patuca III estaba planificado para entregarse en diciembre de 2013, al final del período del expresidente Porfirio Lobo Sosa; sin embargo, los contratiempos de índole económico paralizaron las obras.
Leonardo Deras, gerente técnico de la Enee, dijo a LA PRENSA desconocer la fecha exacta de la reanudación del proyecto en virtud que “falta concluir el financiamiento con China, y de eso no tengo información”.
Agregó que los trabajos se encuentran paralizados desde finales de 2013, ya que los 50 millones de dólares iniciales solo alcanzaron para terminar la primera fase de la represa, que consistió en el revestimiento de los estribos laterales de la montaña, la construcción del túnel de derivación del río y la casa de máquinas.
Derroche
Sigfrido Sandoval, miembro de la comisión de energía del Colegio de Ingenieros Mecánicos, Electricistas y Químicos de Honduras (Cimeqh), deploró el estancamiento de Patuca III y dijo que lastimosamente los 50 millones de dólares con los que arrancó el embalse se derrocharon en un proyecto de viviendas para los ingenieros y técnicos y muy poco se avanzó en la obra como tal.
Aseveró que ni siquiera se logró concluir la desviación del río Patuca, que era una de las obras concebidas en la primera etapa y tampoco se ha pagado a los dueños de las tierras afectadas. “En fin el proyecto es un total descalabro, porque no se ha logrado conseguir los 300 millones de dólares para terminarlo”, dijo.
