San Pedro Sula, Honduras
Cuatro días después del incendio que dejó sin hogar a 41 familias del bordo de La Primavera, todavía se siente el olor a tragedia en el lugar.
Los más de 200 habitantes afectados entre niños, ancianos, adultos y jóvenes duermen casi en la intemperie desde el 24 de diciembre que sucedió el hecho.
Sin embargo, perder sus bienes no es el único problema de estas personas. Ahora se enfrentan a la insalubridad que ha causado este suceso.
Roberto Kattán, director de brigadas médicas del Club Rotario San Pedro Sula, explicó que la situación es delicada.
“Vamos a trabajar con estas personas hasta darles parte de un desarrollo integral, pues el problema es grave.
No solo es que se quemaron las casas, hay graves problemas de higiene, no tienen baños para hacer sus necesidades ni lugares adecuados para cocinar sus alimentos; es por eso que los rotarios estamos tomando acción para poder solucionar un poco de estas dificultades”.
Kattán vaticinó que estas personas serán parte del problema de déficit habitacional que enfrenta la ciudad.
A todo esto se suma la acción de vividores que, aprovechándose de la situación, se mezclan con los afectados para recibir la ayuda que instituciones humanitarias les están dando.
“Muchos vecinos están haciendo guardia y la mayoría estamos durmiendo aquí en la calle, una porque no tenemos donde ir y otra porque ya hay gente que incluso ha venido a medir los solares con la intención de conseguir un pedazo de tierra; no obstante, no lo vamos a permitir.
Esta tragedia nos dejará más pobres, pero eso no quiere decir que otra gente mal intencionada nos va a hacer como quiere; vamos a defender lo nuestro aunque no nos quede nada”, manifestó Rodrigo Gutiérrez, afectado.
Actualmente se están habilitando centros de acopio para organizar mejor en las carpas las donaciones a las personas y darles atención médica.
Aunque todavía no se sabe con certeza qué provocó el incendio, la teoría más fuerte es que una estufa que quedó encendida mientras cocinaban frijoles fue la causa principal, pero de manera no oficial algunos habitantes de la zona no descartan que la verdadera razón haya sido la pólvora, pues ya sospechaban que en una de las viviendas se estaban almacenando cohetes para venta ilícita.
Los bomberos aún no definen la causa real del siniestro.
Los voluntarios piden colaboración para recolectar ropa, alimentos, colchones, agua potable y todo lo necesario en estas tragedias. Las donaciones se están entregando en la entrada de la colonia.
 Las personas que quedaron sin hogar están durmiendo en un solar de un taller cercano, pero no tienen lugar para hacer sus necesidades, bañarse o cocinar los alimentos, por lo que urge su reubicación.
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Inicia el incendio y consume 41 viviendas A eso de las nueve de la noche del 24 de diciembre, los pobladores del bordo de La Primavera reportaron a los bomberos que se estaban incendiando las casas.
Comienzan a llegar las ayudas para las familias Al día siguiente del siniestro, muchas organizaciones comenzaron a solidarizarse con las familias damnificadas llevando alimentos, ropas, colchones, agua, entre otros.
Alcaldía apoya limpiando escombros La Municipalidad envió al lugar la maquinaria necesaria para limpiar y recoger los escombros que dejó el fuego; sin embargo, todavía no hay dónde albergar a los damnificados.
