Tegucigalpa, Honduras.
El Gobierno solicitó a la Dirección General de Transporte (DGT) un análisis técnico de las tarifas del transporte público.
En 2012 se realizó el último aumento a las tarifas, el cual consistió en 50 centavos al bus amarillo y un lempira a los autobuses del servicio ejecutivo.
Este incremento se hizo efectivo por petición de los transportistas debido al alza a los combustibles en ese entonces.
Pero ahora, cuando por fin los precios descienden, la población exige una revisión y un ajuste al pasaje.
Yovany Dubón, director de la DGT, manifestó: “Si cuando la gasolina estuvo cara no subimos el pasaje, es difícil que ahora que ha bajado 23 lempiras lo vayamos a hacer”.
Aclaró que van a hacer una revisión justa porque saben que los repuestos han ido en aumento.
Detalló que por más que los transportistas soliciten un aumento, la postura del Gobierno es no afectar a la población.
Jorge Lanza, transportista, dijo que lo mínimo que tendría que valer el pasaje es 11 lempiras el bus amarillo y 16 el ejecutivo.
Finalizó acusando que no les pagan los subsidios en el tiempo estipulado y están cansados de esta situación.
Gloria Pérez, directora del Comité para la Defensa del Consumidor Hondureño (Codecoh), analizó la situación explicando que no es posible que los transportistas esperen un aumento al pasaje cuando toda la población estaba esperando una rebaja.
Además, Pérez señaló que están solicitando al gobierno una reunión en que se tome en cuenta a todas las partes y se escuche el análisis de la realidad actual que ellos han hecho como protectores del consumidor.
El Gobierno solicitó a la Dirección General de Transporte (DGT) un análisis técnico de las tarifas del transporte público.
En 2012 se realizó el último aumento a las tarifas, el cual consistió en 50 centavos al bus amarillo y un lempira a los autobuses del servicio ejecutivo.
Este incremento se hizo efectivo por petición de los transportistas debido al alza a los combustibles en ese entonces.
Pero ahora, cuando por fin los precios descienden, la población exige una revisión y un ajuste al pasaje.
Yovany Dubón, director de la DGT, manifestó: “Si cuando la gasolina estuvo cara no subimos el pasaje, es difícil que ahora que ha bajado 23 lempiras lo vayamos a hacer”.
Aclaró que van a hacer una revisión justa porque saben que los repuestos han ido en aumento.
Detalló que por más que los transportistas soliciten un aumento, la postura del Gobierno es no afectar a la población.
Jorge Lanza, transportista, dijo que lo mínimo que tendría que valer el pasaje es 11 lempiras el bus amarillo y 16 el ejecutivo.
Finalizó acusando que no les pagan los subsidios en el tiempo estipulado y están cansados de esta situación.
Gloria Pérez, directora del Comité para la Defensa del Consumidor Hondureño (Codecoh), analizó la situación explicando que no es posible que los transportistas esperen un aumento al pasaje cuando toda la población estaba esperando una rebaja.
Además, Pérez señaló que están solicitando al gobierno una reunión en que se tome en cuenta a todas las partes y se escuche el análisis de la realidad actual que ellos han hecho como protectores del consumidor.
