San Pedro Sula, Honduras.
Espectacular, así se define la segunda edición del Colorun. Los hondureños dieron total respaldo a los niños que son asistidos en la emergencia pediátrica del hospital Mario Rivas.
La mañana fue perfecta. El clima favoreció. El ambiente de hermandad, seguridad y solidaridad prevaleció durante las seis horas de la fiesta de colores.
Desde las seis de la mañana los colorunners calentaron motores bailando zumba.
Por grupos de familias y amigos se fueron sumando hasta que a las siete de la mañana miles estaban listos en la meta de Embotelladora de Sula.
META RECAUDADA POR EL COLORUN
El lanzamiento de polvos de colores y el show de juegos pirotécnicos eran la señal. La caminata estaba por comenzar.
Cinco, cuatro, tres, dos, uno... Los colorunnes empezaron el recorrido por los cinco kilómetros más felices del planeta.
Ambientazo
Al ritmo pop y rociados de verde cruzaban el primer kilómetro a cargo de Cargill. Ahí también posaron con zancos.
La gama de diversión se extendió hasta el kilómetro 2. El elenco de Calle 7 los puso a bailar con su coreografía mientras esparcían el rojo que lanzó Subway.
Unos corriendo y otros caminando llegaron al kilómetro 3, donde predominó el amarillo. Muchos posaron en un marco gigante elaborado por supermercados La Antorcha.
Los patrocinadores lo dieron todo. En el recorrido, tres bandas de guerra animaban y ponían a bailar con sus ritmos pegajosos.
Las bandas del Instituto Tecnológico Las Vegas y el José Trinidad Reyes (JTR) de San Pedro Sula y El Patria, de La Lima, prendieron el ambiente. En el kilómetro 4, Diunsa lanzó el azul mientras se divertían ejercitándose con zumba.
Fue una mañana mágica, llena de felicidad. Alrededor de 15,000 personas se convirtieron en una sola familia.
La fiesta la continuaba con Embotelladora de Sula y su color anaranjado. Durante todo el circuito se contó con la presencia de la Policía Nacional. En cada kilómetro había puntos de hidratación y personal del Cuerpo de Bomberos y Cruz Roja. El ambiente de tranquilidad estuvo garantizado. A los colorunners les tomó unas dos horas llegar al final del recorrido en el kilómetro 5. Pero ese camino era solo la mitad de la espectacular mañana.
Espectacular, así se define la segunda edición del Colorun. Los hondureños dieron total respaldo a los niños que son asistidos en la emergencia pediátrica del hospital Mario Rivas.
La mañana fue perfecta. El clima favoreció. El ambiente de hermandad, seguridad y solidaridad prevaleció durante las seis horas de la fiesta de colores.
Desde las seis de la mañana los colorunners calentaron motores bailando zumba.
Por grupos de familias y amigos se fueron sumando hasta que a las siete de la mañana miles estaban listos en la meta de Embotelladora de Sula.
 Gracias al apoyo de los hondureños se recaudaron 3.7 millones de lempiras. |
El lanzamiento de polvos de colores y el show de juegos pirotécnicos eran la señal. La caminata estaba por comenzar.
Cinco, cuatro, tres, dos, uno... Los colorunnes empezaron el recorrido por los cinco kilómetros más felices del planeta.
Ambientazo
Al ritmo pop y rociados de verde cruzaban el primer kilómetro a cargo de Cargill. Ahí también posaron con zancos.
La gama de diversión se extendió hasta el kilómetro 2. El elenco de Calle 7 los puso a bailar con su coreografía mientras esparcían el rojo que lanzó Subway.
Unos corriendo y otros caminando llegaron al kilómetro 3, donde predominó el amarillo. Muchos posaron en un marco gigante elaborado por supermercados La Antorcha.
Los patrocinadores lo dieron todo. En el recorrido, tres bandas de guerra animaban y ponían a bailar con sus ritmos pegajosos.
VIDEO: Así se vivió el Colorun 2014
 La fiesta arrancó con bailes de zumba a las 6:00 am. |
Fue una mañana mágica, llena de felicidad. Alrededor de 15,000 personas se convirtieron en una sola familia.
La fiesta la continuaba con Embotelladora de Sula y su color anaranjado. Durante todo el circuito se contó con la presencia de la Policía Nacional. En cada kilómetro había puntos de hidratación y personal del Cuerpo de Bomberos y Cruz Roja. El ambiente de tranquilidad estuvo garantizado. A los colorunners les tomó unas dos horas llegar al final del recorrido en el kilómetro 5. Pero ese camino era solo la mitad de la espectacular mañana.
Recaudación
El festtejo continúo con el concierto. Todos gozaron. “Ha sido una respuesta realmente avasalladora. Ya tenemos los planos aprobados para la obra. Los fondos recaudados hoy -ayer- son para completar la primera fase de la sala de emergencia de pediatría del hospital Mario Rivas”, expresó
María del Rosario Selman, presidenta ejecutiva de Banco del País. Mientras los Djs y cantantes animaban el ambiente, los participantes se tomaban fotografías.
La euforia se apoderó de todos cuando llegó el momento más importante de la mañana. Al filo de las 11:00 am, los organizadores de la segunda edición de Colorun anunciaban el monto recaudado en inscripciones. La cifra de 3,701,120.80 hizo desbordar de alegría a los presentes.
Gracias a ese total apoyo, la primera etapa de la obra comienza en enero. “Seguiremos haciendo esta
actividad hasta que logremos finalizar la ampliación de la sala”, anunció Selman. “Tenemos todo listo y pronto vamos a colocar la primera piedra.
Definitivamente nuestra meta fue superada y el próximo año seguimos”, dijo Georgina Barahona, directora de Grupo Karim’s. Aplausos, gritos y saltos. Valió la pena. La caminata de la solidaridad superó las expectativas y manchados de pies a cabeza los colorunners se identificaron con la noble causa.
