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Unicef declara a Honduras como uno de los países más violentos

  • 01 octubre 2014 /

El Salvador es uno de los países más violentos de Centroamérica, después de Honduras y Guatemala declaró Unicef en un comunicado

San Salvador, El Salvador.

El Salvador tiene la tasa de homicidios de niños y adolescentes más alta del mundo, señaló hoy la Unicef, que destacó, sin embargo, varios avances en la situación de la niñez salvadoreña logrados en los últimos años.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) dijo en un comunicado que un reciente informe de ese organismo 'sitúa a El Salvador a la cabeza de los países con mayores tasas de homicidios contra niñas, niños y adolescentes entre 0 y 19 años en el mundo, con 27 muertes por 100.000 habitantes'.

En esta clasificación, El Salvador es seguido de Guatemala, con 22 homicidios por 100.000 habitantes, y Venezuela, con 20, indicó.

'El futuro de las niñas y los niños en El Salvador está en una encrucijada', aseveró el representante de la Unicef en este país centroamericano, Gordon Jonathan Lewis, en una conferencia de prensa con motivo de celebrarse hoy el Día del Niño en El Salvador.

Instó a despertar 'ante la realidad de necesitar responder a ciertas vulneraciones de derechos que tiene la población infantil para poder ayudar a que el país pueda salir adelante'.

'Uno de los mayores retos que el nuevo Gobierno (que hoy cumple cuatro meses) debe asumir es el derecho a la protección integral, que ha sufrido duros golpes como resultado de la cultura de violencia que afecta a la niñez y adolescencia del país', recalcó el comunicado.

El Salvador es uno de los países más violentos de Centroamérica, después de Honduras y Guatemala, con un promedio diario de homicidios de 10,5, según datos de la Policía.

Sin embargo, en áreas sociales, Lewis destacó que 'uno de los datos más positivos que tiene El Salvador con relación al desarrollo en la primera infancia y menores de cinco años es la progresiva reducción de las tasas de mortalidad en niñas y niños'.

Detalló que esa tasa de mortalidad bajó de 68 por cada 1.000 nacidos vivos en 1988 a 19 en 2008, y aunque matizó que no hay 'datos más actualizados', insistió en que se sigue considerando a esta última como la 'tasa nacional'.

La Unicef colabora con el Gobierno salvadoreño en una nueva medición de la mortalidad infantil, refirió Lewis.

Lewis consideró que este indicador mejoró 'fundamentalmente por el hecho de que (...) hubo una inversión decidida por parte del Estado en programas que generan resultados bastante rápidos'.

Entre esas iniciativas están programas de vacunación y de control de enfermedades diarreicas y respiratorias, según el representante de la Unicef.

'Sin embargo, a pesar del hecho de que tenemos avances importantes en la reducción de la mortalidad infantil, persisten inequidades', como mayor porcentaje de muerte de niños en zonas rurales que en urbanas y falta de atención hospitalaria de calidad a las madres, subrayó.

Lewis indicó asimismo que en el 20 % de la población salvadoreña más rica 'sólo seis niños mueren antes de llegar a los cinco años de vida', pero 'en el 20 % más pobre mueren 29'.

Agregó que en educación, entre otros campos, hay 'buenas noticias', pues entre 2000 y 2013 la matrícula de niños en parvularia aumentó del 39 % al 56 % y en el nivel medio del 26,6 % al 37,6 %, aunque en este último aún 'es baja'.

La matrícula en primaria se elevó del 86,0 % al 95,5 % entre 2000 y 2006, pero volvió a bajar al 88,2 % en 2013, en parte por el abandono de alumnos por la violencia que afecta a las escuelas, entre otros factores, añadió.

Según Lewis, la población infantil de El Salvador representa el 35 % (unos 2,2 millones) de la población general, que es de 6,3 millones de personas 'residentes en el país', excluyendo a las que viven en el extranjero, que son unos tres millones, según datos del Gobierno. EFE