Pese a que los operativos están en 8 puntos conflictivos del
Bajo Aguán y a que se hacen revisiones minuciosas a buses, camiones y vehículos particulares, los resultados obtenidos hasta el momento no son los esperados.
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En los 10 días que tienen de estar en la conflictiva zona, los 600 elementos del Ejército y la Policía que conforman el comando Fuerza de Tarea Xatruch II apenas han decomisado cuatro armas cortas.
En vista de los escasos resultados que contrastan con la creciente violencia en la zona, ayer se reunieron los altos mandos del operativo que sigue manteniendo su promesa de devolver la paz a los pobladores del Aguán.
El subdirector general de la Policía Nacional, René Maradiaga Panchamé, junto al comandante de la operación Xatruch II Julio Espinal; el director de Recursos Humanos del Ejército y comandante militar de Xatruch II Gustavo Amador y el comandante del 15 Batallón de Infantería, Raynel Fúnez, se reunieron a puerta cerrada en Trujillo para reforzar sus estrategias.
En el encuentro los jefes planificaron mejores estrategias y aseguran que van a fortalecer las acciones.
“Estamos aquí porque ante los hechos nos queda claro que nuestro papel es fortalecer las acciones. Xatruch II tiene 10 días de estar en la zona y debemos coordinar acciones concretas para tener resultados positivos en las operaciones”, manifestó Maradiaga Panchamé.
Recorrido aéreo
Luego del encuentro, los jefes del comando realizaron una inspección aérea de algunas fincas invadidas.
El equipo de LA PRENSA se unió a la misión que sobrevoló la finca La Consentida de 476 hectáreas y la finca Paso Aguán de 800 hectáreas, ambas han sido tomadas por campesinos que se identifican dentro del Movimiento Campesino de Recuperación Rigores MCRR desde el 13 de agosto.
Ayer se anunció que hoy se llevarán a cabo desalojos de fincas invadidas. Los puestos de control desde ayer se ubicaron cerca de los accesos a las fincas esperando la orden. Un contingente policial y militar ocupaba la zona de Honduras Aguán y la Colonia Santa Elena.
“Guerra de guerrillas”
El presidente del Congreso, Juan Hernández, anunció ayer que el conflicto agrario en el Bajo Aguán se resolverá en el corto plazo y será agenda de prioridad del Legislativo refrendar un acuerdo entre el Gobierno y las partes en conflicto.
Hernández afirmó que el proceso de concertación entre las partes anda en un 90% de solución; por tanto, sugirió al diputado Jorge Alberto Elvir retirar una moción que estaba encaminada a pedir a las autoridades correspondientes proceder a un desarme general en la zona del Bajo Aguán. El sector se ha tornado conflictivo por la disputa de tierras entre campesinos y terratenientes, al extremo que en los últimos meses se han producido 40 muertos, entre campesinos, guardias de seguridad y víctimas inocentes. El diputado Elvir, que mocionó ayer por el desarme, no descarta que en la zona existan grupos irregulares que están aprovechando las coyunturas para desatar “una guerra de guerrillas en la zona”.
El presidente del Legislativo, Juan Hernández, afirmó que los acuerdos a que se lleguen entre el Gobierno, los empresarios y los campesinos tendrán el aval del Congreso si las partes en conflicto así lo consideran pertinente.
