18/03/2024
03:55 PM

Grupos étnicos de Honduras encaran y sobreviven al covid-19 con medicina natural

Gracias a Dios tiene un importante descenso de casos de covid-19 en comparación al resto de departamentos; personal de Salud cree que se debe a que muchos optan por remedios caseros.

San Pedro Sula, Honduras.

El lavado de manos constante con agua y jabón, uso de gel antibacterial, mascarilla y el distanciamiento social, es lo que recomienda la Secretaría de Salud ante los embates de la pandemia del covid-19, pero la población de Gracias a Dios tiene fe en algo más allá de lo convencional y lo aplican a diario en sus hogares: medicina natural.

Aunque el uso de la medicina natural no es avalado por la ciencia, ostenta un lugar respetado en regiones con creencias profundas.

Este departamento es el segundo más grande del país después de Olancho, su ubicación es bastante difícil, ya que sólo se puede llegar por agua o por aire. Es una comunidad que geográficamente está retirada del resto y sigue siendo olvidada por las autoridades de Gobierno, pero era cuestión de tiempo para que el covid-19 comenzara a cimentar sus pasos en este territorio del oriente del país, exactamente el 14 de junio de 2020, cuando se reportó el primer contagio.

Dato
El presupuesto anual para el Hospital Puerto Lempira es de 106 millones de lempiras al año, de estos, 78 millones se detinan para salarios del personal.
Trinidad Tinoco, jefa regional de la Secretaría de Salud en Gracias a Dios, informó que en los últimos meses ha bajado la incidencia de casos covid-19 en el departamento. Al cierre de 2020 se reportaron 844 casos, de esos 620 eran de Puerto Lempira, 21 de ellos murieron y 861 se recuperaron, teniendo una tasa de letalidad de 2.4%.

Los registros de Salud indican que del 1 de enero al 22 de febrero de 2021 se reportaron 24 casos y ninguna muerte por el virus.

'La mayoría de los contagiados en Gracias a Dios son personas en un rango de edad entre 20 a 59 años, casi todos jóvenes y adultos. Hay que mencionar que muchas de las familias han optado por tés naturales, eso les ha ayudado a prevenir o a disminuir los efectos de la enfermedad', reconoció Tinoco.

Foto: La Prensa

El Hospital de Puerto Lempira posee múltiples carencias de equipo para atender pacientes covid-19.
'Tenemos un número bajo de casos desde hace como cinco meses y el pico más alto en este departamento fue en julio y agosto de 2020. Los factores de la disminución pueden ser varios, en lo particular, considero que los misquitos tienen mayor resistencia al resto de la población y porque ellos consumen mucha medicina natural, eso de alguna manera ha aumentado sus defensas ante el virus', opinó Hugo Reyes Girón, director ejecutivo del Hospital Puerto Lempira.

En cuanto a los insumos señaló que el hospital está con lo necesario, al igual que con la mayoría de recurso humano, desde enfermería hasta médicos generales, sin embargo, lamentó que no hayan suficientes doctores especialistas, que no tengan el equipo ni la logística suficiente para atender a pacientes graves de covid-19, quienes son asistidos hasta la fecha en un punto de anexo al Hospital Puerto Lempira, el cual fue facilitado de manera gratuita por un ciudadano altruista del sector.

En dicho centro asistencial tienen apenas cinco camas para atender a pacientes covid-19, pero cuando el número de estos aumenta, los obliga a cerrar la consulta externa y convertir una sala de hospitalización con capacidad máxima de 23 camas.

Gran parte de los grupos étnicos de nuestro país, ante los pocos insumos que les provee la Secretaría de Salud, están sobreviviendo ante la pandemia a través de la medicina natural más que con los servicios en los centros de salud y hospitales.

El pueblo garífuna es uno de los que más usa remedios caseros, tal y como lo han venido haciendo por años y con base a la tradición de sus ancestros.

Foto: La Prensa

Tulio Mariano González
Tulio Mariano González, representante de la comunidad garífuna en Honduras, comentó que 'en términos generales el nivel de contagios en nuestros grupos es menor que en el resto de la población, esa es nuestra percepción, sin embargo, debe ser refrendada por los especialistas en medicina. En nuestras comunidades la mayor tendencia es acudir a la medicina natural, como por ejemplo bañarse en el mar o beber guifity con alcohol, pues se cree que eso ayuda a fortalecer la inmunidad del organismo, más ahora en tiempos de pandemia'.

'La medicina natural para atender la pandemia no la usa todo el pueblo garífuna, más que todo son aquellos que viven en zonas muy lejanas a los cascos urbanos, como por ejemplo en Iriona, Colón, y Juan Francisco Bulnes, en Gracias a Dios', aclaró González.

El también exsecretario de Cultura, Artes y Deportes en Honduras, indicó que desde que la pandemia llegó al país han sostenido reuniones para dialogar el aspecto de cómo los grupos étnicos son marginados al momento de buscar asistencia médica. 'De por sí el acceso a los centros de salud y hospitales en Honduras no es el mejor, eso nos golpea a todos, no digamos a los etnias', remarcó.

Foto: La Prensa

Juan Palma
Juan Palma, representante del grupo tolupán, comentó que 'hemos estado respetando las medidas de bioseguridad y no hay muchos contagios en nuestras tribus porque casi no salen a las zonas urbanas'.

Palma dijo ser consciente de la poca atención que se le presta a los grupos étnicos en nuestro país. 'Los problemas básicos los atendemos con medicina natural, pero ya por ejemplo, cuando el covid-19 avanza en el cuerpo, preferimos acudir a hospitales regionales aunque el servicio sigue siendo deficiente'.

Ejemplificó que los tolupanes de lugares como Yorito, Victoria, El Negrito, Olanchito y la Montaña de la Flor, abordan la lucha contra los síntomas leves de la pandemia con plantas naturales, siguiendo su tradición y por falta de fe en la medina convencional.

Foto: La Prensa

Cendela López
Cendela López, presidente de la asociación de mujeres misquitas en Gracias a Dios, aseguró que 'nosotros sobrevivimos con el poder el Dios y con algunas cosas ancestrales que hemos practicado por años, sobre todo cuando no hay médicos o medicinas en el Hospital Puerto Lempira y los centros de salud. A la fecha, muchas de las personas que se contagiaron y sobrevivieron fue gracias a la medicina natural como las hierbas, pero reconozco que una parte también lo logró gracias a las atenciones en el Hospital Puerto Lempira'.

Lamentó que el departamento de Gracias a Dios esté olvidado por la Secretaría de Salud, pues contrario al director del Hospital Puerto Lempira, afirma que no tienen médicos suficientes ni insumos.

Señaló que durante esta emergencia sanitaria quienes habitualmente asisten al hospital de Puerto Lempira son los pobladores que radican allí mismo, ya que los habitantes de los otros municipios optan más por la medicina natural, pues en gran parte lo que influye es la enorme distancia y las dificultades de acceso; no hay carreteras y les toca muchas veces moverse por agua para quedarse un día en una aldea y el siguiente día salir hacia la cabecera.

Grupos étnicos


1. La etnica pech se encuentra localizada en los departamentos de Olancho, Colón y Gracias a Dios.

2. Los tawahkas habitan tierra adentro de la costa misquita, la mayoría de ellos en la aldea de Krausirpi, ubicada en la margen del río Patuca en el corazón de la zona selvática hondureña.

3. Los lencas habitan en Intibucá, La Paz, Lempira y el sur de Santa Bárbara, centro y sur del departamento de Francisco Morazán, así como en el departamento de Valle, donde colindan con los lencas de la República de El Salvador.

4. Los tolupanes están en los municipios de Morazán, El Negrito, Victoria, Yorito, Yoro, Olanchito y en el departamento de Francisco Morazán, en los municipios de Marale y Orica.

5. Los maya chortí se localizan en los departamentos de Ocotepeque, Colón, Copán y una estrecha franja del norte de los departamentos de Cortés y de Santa Bárbara.

6. El pueblo nahua se encuentra en el departamento de Olancho, en los municipios de Catacamas, Gualaco, Guata, Jano y Esquipulas del Norte.

7. Los garífunas han conformado los departamentos de Cortés, Atlántida, Islas de Bahía, Colón y Gracias a Dios. La mayoría de las comunidades garífunas están ubicadas en zonas costeras próximas a las áreas urbanas de Puerto Cortés, Tela, La Ceiba y Trujillo.