19/04/2024
12:32 AM

Incomunicados y en riesgo en Copán y Belén Gualcho

Copán Ruinas está sin servicio de energía, telefonía, agua y desabastecidos de alimentos.

TEGUCIGALPA.

Graves daños se reportan en la zona occidental, los departamentos de Copán y Ocotepeque registran daños en la infraestructura vial que mantiene incomunicados tanto a Copán Ruinas como a Belén Gualcho en Ocotepeque.

Pero, además, hay puentes caídos que mantienen aislados a varios poblados en la región.

Están sin energía, sin servicios de telefonía, Internet y agua. En Copán Ruinas no tienen paso ni para Guatemala ni para el resto de Honduras, y pese a que han hecho reiterados llamados al Gobierno, no tienen respuestas.

“La red vial del municipio colapsó en un 80%, luego del paso del huracán Iota. Las carreteras y accesos a la ciudad están en su mayoría destruidas, dejando incomunicadas a varias aldeas; además, por dos días consecutivos no hemos tenido energía eléctrica y hay fallas en la telefonía e Internet”, explicó Mauricio Arias, alcalde de Copán Ruinas.

Ayer la Cruz Roja Hondureña apoyó con un helicóptero para trasladar medicamentos y otros materiales, ante la difícil situación que enfrentan.

En el Parque Arqueológico El Puente, en La Jigua, Copán, las aguas del río Chinamito inundaron el sitio, pero no dejaron mayores problemas.

El Parque Arqueológico El Puente fue afectado por las llenas.

Alarma

En Belén Gualcho, en Ocotepeque, nadie durmió el jueves. Los deslizamientos en el cerro Mirasol pusieron a toda la comunidad en alerta, especialmente a los pobladores de la aldea Suyande, adonde uno de los cerros se vino abajo y obstruyó el paso del río Mocal, o Suptal, como le llaman en la zona, y formó un dique.

La voz se corrió entre los pobladores porque las aguas quedaron estancadas y había temor que esto provocará el deterioro de otras aldeas que desde Eta han sufrido las inclemencias de la naturaleza al destruir varias viviendas.

“La comunidad tembló y sentimos cuando la tierra se venía. No dormimos, el miedo a ese tapón nos desveló porque creímos que podría destruir los barrios y aldeas”, dijo Ángel Bajurto, vecino de Belén.

La zona ha presentado problemas de derrumbes.

“La causa en estos casos son los ríos o quebradas que al crecer erosionan y causan inestabilidad. Se producen los derrumbes y erosionan la ladera”, explicó a LA PRENSA el geólogo Juan Andino.

Casi 12 horas después, el agua rompió el alud y empezó a correr. El cauce era abundante y llevaba gran fuerza, por lo que se alertó a las comunidades por temor a daños en otras zonas.

El alcalde Cristian Tenorio hizo varios llamados ayer porque llevan dos días de no tener acceso a Santa Rosa de Copán, y hay necesidad de alimentos. Ayer las Fuerzas Armadas enviaron un helicóptero con ayuda a la zona.