Tegucigalpa, Honduras.
Elementos del Cuerpo de Bomberos y de las Fuerzas Armadas de Honduras se unieron junto a voluntarios para controlar un incendio que por tres días se mantuvo vivo en el cerro Upare.
Desde casi toda la ciudad se divisaba una enorme columna de humo que salía desde una zona montañosa y verde, al oeste de Tegucigalpa.
Esto se debía al incendio forestal de grandes proporciones que consumía el bosque de pino y roble que predomina en la zona de Upare.
Juan Ramón Hernández Campos, director del Comando de Apoyo al Manejo de Ecosistemas y Ambiente C-9 de las Fuerzas Armadas (FF AA), informó que el incendió se inició en la madrugada del viernes, por lo que se trasladó personal a la zona para controlar el fuego.
Elementos del Cuerpo de Bomberos y de las Fuerzas Armadas de Honduras se unieron junto a voluntarios para controlar un incendio que por tres días se mantuvo vivo en el cerro Upare.
Desde casi toda la ciudad se divisaba una enorme columna de humo que salía desde una zona montañosa y verde, al oeste de Tegucigalpa.
Esto se debía al incendio forestal de grandes proporciones que consumía el bosque de pino y roble que predomina en la zona de Upare.
Juan Ramón Hernández Campos, director del Comando de Apoyo al Manejo de Ecosistemas y Ambiente C-9 de las Fuerzas Armadas (FF AA), informó que el incendió se inició en la madrugada del viernes, por lo que se trasladó personal a la zona para controlar el fuego.
“Las labores se comenzaron el viernes en horas de la mañana, quedando controlado al mediodía; sin embargo, el incendio se reactivó debido a los vientos predominantes en el área y tomó mayor fuerza”, explicó Hernández.
Este domingo a las 05:30 am se ingresó en la zona con 270 soldados que trabajaron en control, rondas y ataque directo.
Debido al difícil acceso del lugar, con pendientes pronunciadas que van desde los 1,200 a 1,600 metros de altura, se necesitó el apoyo de un helicóptero para hacer descargas de agua, las cual fue tomada de la represa Los Laureles, se utilizaron 5,775 galones de agua.
“Cabe mencionar que no hay vidas en peligro, tampoco hay viviendas que puedan ser consumidas por el fuego. El incendio está activo, pero controlado”, enfatizó.
